James Bond mete la quinta

'Bond in Motion', nombre de la exposición, permanecerá abierta hasta octubre de 2022. Un año por delante para poder ver de cerca el Lotus Esprit S1, que se convierte en un pequeño submarino con lanzador de misiles tierra-aire en 'La espía que me amó' (1977) y que un comprador anónimo (se dice que fue Elon Musk) adquirió en una subasta en 2013 por 900.000 euros. O el icónico y elegante Aston Martin DB5, la estrella de la colección por ser el que más veces se ha utilizado en los diferentes rodajes. De hecho, ha aparecido en cuatro cintas, 'Golden Eye' (1995), 'El mañana nunca muere' (1997), 'Skyfall' (2012) y 'Spectre' (2015), y también saldrá en 'Sin tiempo para morir', la nueva película de 007 que se estrena el próximo 1 de octubre.

Figura, cómo no, el Aston Martin V12 Vanquish, que se hacía invisible proyectando un haz de luces que hacía parecer que el coche no estaba ahí. O el Aston Martin V8, con esquís que se desplegaban por los laterales para poder desplazarse por la nieve. También se puede ver el Aston Martin DB10, un cupé de dos puertas que se desarrolló específicamente para rodar 'Spectre' (2015) y no existe en realidad; la aeronave monoplaza con la que Bond podía volar, la Acrostar BD-5J Microjet; la moto BMW R 1200C, con la que salta por los tejados; el helicóptero de spectra Hiller UH 12C , el Tuk-Tuk Taxi Cagiva con el que lanza granadas y que además hace caballitos; el Mercury Cougar XR7, que utiliza junto con su compañero Félix, agente de la CIA; el triciclo en el que huye por el desierto y la WetBike, una moto de esquí acuático. Como se ve, la muestra es de lo más variada.

La próxima entrega de 007, 'Sin tiempo para morir', será la película número 26 de la saga y a su vez la última en la que podamos ver a Daniel Craig metido en el personaje que popularizó el «Martini con hielo, mezclado, no agitado». Craig interpreta a Bond desde 2006 y le ha dado vida en las cinco últimas películas del espía.