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Foto de familia de los participantes durante su retiro, en los jardines del centro 'Ain Karim' de Haro. M. C.
Espido Freire y Carlos Fidalgo ejercen de maestros para treinta escritores
Haro

Espido Freire y Carlos Fidalgo ejercen de maestros para treinta escritores

La Universidad de La Rioja y el Campus Valle de la Lengua celebran una experiencia inmersiva en literatura creativa. Durante dos días han trabajado la estructura del proceso narrativo

Lunes, 25 de marzo 2024, 07:47

La escritura creativa ha unido este fin de semana a treinta amantes de la creación literaria llegados desde todos los puntos de España (Marbella, Cádiz, Huelva, Cataluña, Castilla-La Mancha), incluso de Holanda, en un pequeño paraíso de Haro, el 'centro de espiritualidad 'Ain Karim'. El objetivo: mejorar sus habilidades y técnicas de escritura, dirigidos por los escritores Espido Freire y Carlos Fidalgo. Una iniciativa de la Universidad de La Rioja (UR) y el Campus Valle de la Lengua que pronto agotó sus plazas.

Yolanda Pérez, de Madrid, se encontraba en la lista de espera. «Me parece fantástico que se organicen este tipo de encuentros literarios en un entorno maravilloso, y además con dos ponentes excepcionales. Creo que hemos aprendido mucho y, además, de una manera muy práctica», explicaba.

Carlos Villar, subdirector del área de Escritura Creativa en Español, se mostraba muy satisfecho: «La mayoría de los participantes llegan de puntos muy lejanos, y han venido exclusivamente para hacer este curso de dos días. Esto demuestra el interés que ha suscitado esta actividad. Es una satisfacción, en un momento en el que la escritura creativa parece que va reduciendo su espacio».

Formación y turismo

«Es un error, porque la escritura creativa no es solo para aquellos que quieren hacer best-sellers, sino que nos viene bien a todos. Es para que las personas aprendan a escribir más y mejor». Una iniciativa, en resumen, que ha fusionado formación y turismo.

Por su parte, Espido Freire consideró un éxito la iniciativa. «Ha ido muy bien, han acudido personas de formaciones y orígenes muy diversos. Con la necesidad de que se les fomentara una estructura, una idea más ordenada de cómo hacer sus futuras obras».

La mayoría de los asistentes eran personas que ya contaban con alguna novela publicada o esbozada. En este sentido, Freire afirmó que «hay gente joven, incluso muy joven, que escribe. El fenómeno 'Wattpad', por ejemplo, está alimentado fundamentalmente por adolescentes. Lo que ocurre es que se trata de una primera etapa. En el momento en el que cristaliza una inquietud y hay una voluntad de mejora es cuando hay una conciencia mayor de lo que se quiere hacer».

La última sesión fue a cargo de Carlos Fidalgo, sobre la literatura fantástica, tras la que se realizó un debate que, como todos los del fin de semana, se alargó. «Es una experiencia muy enriquecedora, y no solo por volver a escuchar a Espido. También por saber dónde van los alumnos, personas con su propio proyecto de novela y a la vez, lectores muy exigentes».

Aprender a escribir desde un análisis global en convivencia

Los participantes en el curso han analizado desde los primeros pasos del proceso creativo, la elección del punto de vista, la creación de personajes o el trabajo de documentación e investigación, hasta aspectos relacionados con el tiempo, el espacio, la atmósfera y la trama. A lo largo de las sesiones, los participantes han trabajado en el desarrollo de la experiencia personal como materia de la escritura, los vínculos emocionales con los textos y aquello que se quiere contar, han aprendido los modos de distinguir qué y cómo puede ser contado, y han sentado las bases para un proyecto personal de creación literaria. Además, han participado en sesiones de lectura y aprendizaje de otros autores y han roto mitos sobre la creación literaria, la historia, la veracidad y la verosimilitud.

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