Dos escritoras para un Día del Libro de memoria y poesía

No es casual

lo que ocurre por azar...

... Pero uno llama azar

a su imaginación insuficiente.

A sus 95 años, la escritora uruguaya Ida Vitale (Montevideo, 1923), Premio Cervantes 2018, estrenará el martes en el Círculo de Bellas Artes de Madrid la lectura del Quijote que durante dos jornadas continuarán representantes de la política y la cultura, además de ciudadanos voluntarios. Será el 23 de abril, día en que se conmemora la muerte de Cervantes y también la de Shakespeare: durante la ceremonia protocolaria en Alcalá de Henares presidida por los Reyes, Vitale recibirá el galardón que le fue concedido en noviembre.

El jurado la escogió «por su lenguaje, uno de los más destacados y reconocidos de la poesía hodierna en español, que es al mismo tiempo intelectual y popular, universal y personal, transparente y honda. Convertida desde hace un tiempo en un referente fundamental para poetas de todas las generaciones y en todos los rincones del español».

Considerada miembro de la llamada Generación del 45, junto con Mario Benedetti y Juan Carlos Onetti, y representante de la poesía simbolista o esencialista, Vitale es la quinta mujer reconocida por este premio que ha sido concedido a cuarenta hombres. Hasta ahora lo habían recibido las españolas María Zambrano (1988) y Ana María Matute (2010), la cubana Dulce María Loynaz (1992) y la mexicana Elena Poniatowska (2013).

Siendo descendiente de inmigrantes italianos, alumna de José Bergamín, exiliada en México, emigrante en Texas, periodista cultural, traductora y docente además de poeta y autora de un libro titulado 'El ejemplo de Antonio Machado', en la vida y la obra de Ida Vitale, bien se ve, confluyen algunas de las tensiones fundamentales que atraviesan la cultura del siglo XX en América Latina. Para conocerla mejor, su 'Poesía reunida' (Tusquets).

El otro nombre por recuperar es el de María de la O Lejárraga (San Millán de la Cogolla, 1874-Buenos Aires, 1974). Maestra, novelista, dramaturga, ensayista y traductora; ferviente feminista, activista contra la prostitución, la pena de muerte, la guerra y el fascismo; militante socialista y diputada en las Cortes de la Segunda República; exiliada, en fin, sin retorno y solo recientemente reivindicada después de que la mayor parte de su obra apareciese firmada con el nombre de su marido, Gregorio Martínez Sierra, cuyos apellidos ella misma adoptó como firma literaria.

Lejárraga será la protagonista esta semana repleta de actos en torno al Día del Libro. Mañana mismo comienza la programación del Ayuntamiento de Logroño que, entre otras iniciativas de fomento de la lectura, contará con la presentación el martes de las obras ganadoras del Premio Logroño de Novela: 'Secretos', de Jerónimo Tristante, y 'Festival', de Guillermo Sáez, con presencia de ambos autores el martes. La compañía de teatro Zarándula guiará las actividades municipales centradas en el castellano.

Por su parte, el Ateneo Riojano entregará el viernes sus premios anuales. Hasta entonces, la Biblioteca de La Rioja será centro de toda una semana del libro con Lejárraga inspirando actividades como las representaciones teatrales de 'Viajes de una gota de agua' y 'María de la O'. Y en la Filmoteca se proyectará la adaptación cinematográfica de su obra 'Canción de cuna'. Pero tratándose de leer, nada mejor que un libro recientemente reeditado por Juan Aguilera para Renacimiento, 'Una mujer por caminos de España'.