Elyella puso el broche discotequero

Una nueva edición de Ezcaray Fest echaba este domingo el cierre con un vermú en la plaza del conde de Torremúzquiz que de nuevo congregó bastante público. La noche del sábado había sido larga y muy intensa, algo que sin embargo no se notó en la afluencia de la última actuación, a cargo del dúo femenino de guitarra y batería Lady Banana, que congregó más de un centenar de espectadores en el vermú Gómez Cruzado.

Escasas doce horas antes saltaba al escenario principal Elyella cerrando la jornada del sábado para revolucionar totalmente al respetable. Continuaba la lluvia, pero ya formaba parte del festival y la mayoría llevaba algún tipo de chubasquero o habían pasado por las numerosas carpas desplegadas, como la del patrocinador El Naturalista, una de las más grandes.

La formación Elyella llenó el escenario de graves y color con una sesión de más de hora y media, en la que realizaron un repaso por los grandes hits de los últimos muchos años. El dúo de Djs y productores españoles compuesto por Ella (la arnedana María Eguizábal Elías) y Mono, quien nunca ha descubierto su misteriosa identidad.

Han sido tres días de música en una pequeña localidad de 2.080 habitantes, que recibió a 6.500 festivaleros entre los dos días. «El balance es muy positivo –manifestaba su alcalde, Diego Bengoa–. Así nos lo ha transmitido todo el sector hotelero y hostelero del municipio. Es un lujo para Ezcaray poder contar con grupos de este nivel y una organización muy cuidada. Trabajaremos para seguir mejorando, y que la gente que venga esté muy a gusto y con ganas de volver», señaló.

«Estamos muy contentos porque todo ha salido fenomenal –celebraba Anitta Ruiz, responsable de prensa del festival, de Promociones Iregua–. Ni la lluvia pudo con nosotros. Con ganas de más», señaló. Y desveló que, tras el vermú de ayer, empezaban a trabajar: «Estamos preparando la siguiente edición, queremos que sea aún mejor. Si la de 2024 ha sido fantástica, la de 2025 será increíble».

Sin embargo, para el grupo socialista han surgido problemas derivados de la ubicación del escenario principal, situado en el 'atadero', junto al centro de salud. «Nos hacemos eco de las numerosas quejas tanto del personal sanitario como de los usuarios –señalaron en redes sociales–. Urinarios en la puerta del centro de salud, rampa de acceso de camillas y discapacitados cortada y usuarios que no han podido acceder en sillas de ruedas».

Algo que el alcalde no consideró real. «Las críticas de la oposición son falsas, ya que durante el festival accedieron varias personas al centro de salud en silla de ruedas, incluso los miembros de la seguridad del festival les ayudaron como se había establecido. Los propios servicios médicos nos han felicitado por la buena organización y por un fin de semana sin incidencias. Así que el balance es súper positivo», terminó.

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