Miguel Ángel Oliver | Presidente de la Agencia EFE

«EFE es un patrimonio de todos los españoles que deberíamos cuidar»

– ¿Son buenos tiempos para el periodismo de proximidad o malos tiempos para el periodismo en general?

– Siempre son buenos tiempos para el periodismo. Soy optimista porque siempre vamos a tener la necesidad de contar buenas historias y para eso se necesitan personas. Soy contrario a los agoreros. El periodismo tiene un futuro luminoso. Otra cuestión son los soportes. Ningún medio es exclusivamente de un soporte, todos somos de todo y eso supone un examen constante de lo que somos y a qué público nos queremos dirigir. Y esa es posiblemente nuestra crisis. Quiero pensar que las empresas periodísticas y los periodistas somos una crisálida continua, una larva que quiere ser mariposa para llegar a un fin que es conectar con el público. Porque la sociedad siempre quiere recibir buena información.

– Una agencia de carácter estatal en un mundo globalizado, ¿es una cosa del pasado?

– EFE es una agencia local, nacional e internacional. Tiene lo mejor de cada casa. No podemos ser EFE si no estamos en cada lugar ni en cada sitio. Lleva 40 años en La Rioja y de ahí la celebración. Es una circunstancia muy feliz saber que desde hace cuatro décadas EFE amplifica el relato de La Rioja y del resto de comunidades para España y para el mundo. EFE tiene que, a través de lo local, llegar a una dimensión global. Es la maravilla que, como servicio público y con una información de confianza, ofrece EFE.

– Pero estar ahí es caro y EFE es deficitaria, con 18 millones de euros de pérdidas el pasado año. ¿Es sostenible?

– Es sostenible en la medida en que existe un compromiso del Estado a lo largo de nuestros 85 años para mantener un servicio público de información veraz, recogido en la Constitución. EFE es la maquinaria más activa de información veraz en España y en los 110 países del mundo a los que llega. Y esa información hay que pagarla. No esa, sino toda la buena información veraz y confiable. Se trata de un compromiso global, no de este Gobierno, sino del Estado. EFE es un patrimonio de todos los españoles que deberíamos cuidar. El sector público no está para cotizar en el Ibex, sino para dar un servicio.

– Existe una evidente fractura entre sociedad y periodismo...

– Los medios estamos para informar. Tengo la impresión de que en un mundo globalizado las líneas de información y opinión, que antes estaban diferenciadas, se han mezclado y eso ha provocado confusión en las audiencias, que desean noticias limpias y reciben unas cargadas de pólvora. Asumo que hemos generado cierto nivel de desconfianza que se ha trocado en falta de credibilidad. Pero lo que puedo decir es que EFE aporta información limpia, pura y dura, sin línea editorial.

– Habla de información sin línea editorial una semana después de que en el Congreso se le tildase de vocero de Pedro Sánchez...

– En la lógica de los partidos están las líneas de crítica, pero me gustaría saber a qué pasado nos referimos. Llevo 40 años en la profesión y también me siento orgulloso de mis tres años en el Gobierno de España. Sé que el debate existe, pero yo he sido siempre un periodista. Y al frente de EFE soy un periodista más al frente de una agencia de periodistas.

– ¿Resulta doloroso ir al Congreso y decir: «No estoy al servicio de Pedro Sánchez»?

– No es doloroso ir con la verdad por delante. He estado tres años desempeñando un cargo importante en la Administración, como la Secretaría de Estado de Comunicación. Pero tengo una dilatada trayectoria y ahora tengo un objetivo, que es lanzar las capacidades informativas de la Agencia EFE y me siento privilegiado. No hay que entretenerse por un estado de opinión paralelo sino centrarnos en nuestro camino, que es hacer buen periodismo.

– ¿Qué opinión le merece el 'Plan para la regeneración democrática' del Gobierno? ¿Necesita la prensa esa salvaguarda?

– La sociedad necesita tener confianza en los medios. Si no queremos perderla, debemos hacer lo posible por demostrar que somos confiables y ofrecemos información veraz. Estamos en el apoyo de cualquier iniciativa que aclare un panorama que se ha ido ensuciando, que se ha desvirtuado y en el que los medios han perdido credibilidad. Recuperar la credibilidad del periodismo es clave para nuestra democracia.

– ¿Y lo debe hacer un Gobierno?

– Creo que lo demanda toda la sociedad. Asociaciones periodísticas, gobiernos, iniciativas sociales... deben aspirar a crear un nuevo estado menos tóxico de información, donde no abunden los bulos y las 'fake news', sino donde prime la información.