«He dibujado la 'cara b' de Barcelona, la de la ciudad un poco más oculta»

- Después de varios años en Logroño, ha regresado a Barcelona y lo ha hecho por la puerta grande con la publicación de la guía urbana 'Mi Barcelona'. ¿Cómo ha surgido el proyecto?

- Fue un feliz encuentro. Por un lado, el Ayuntamiento de Barcelona edita una colección de cuadernos de viaje que muestran diferentes barrios de la ciudad y yo llevaba bastante tiempo dibujando mi propio cuaderno. Entonces, me pregunté cuál era mi Barcelona, presenté el proyecto y fue aceptado a la primera.

- ¿Qué podemos encontrar en este cuaderno de viaje?

- Hace el número treinta de la colección y está hecho como los cuadernos de viaje a la vieja usanza. Al principio tenía la idea de algo más autobiográfico, pero desde el Gabinete del Servicio de Imagen del Ayuntamiento de Barcelona me pidieron que indagara un poco más en la Barcelona un poco más oculta, en la cultura de lo que podríamos llamar su 'cara B'. Por poner un ejemplo sería como si en Logroño dibujara en la Sala Negra o en el Maltés (recuerdos para 'La Nuri' y sus acólitos'), lugares que no salen habitualmente en los medios mayoritarios. Para mí ha sido muy motivante porque ha sido como una combinación de mis inicios como dibujante, indagando en lugares que no conocía y que incluso he descubierto a la propia gente de Barcelona.

- El libro ha llegado a una feria de prestigio como la de Ginebra. ¿Cómo ha sido la experiencia?

- Estuve en Ginebra por una suerte de azares felices. Xavier Morin, un reconocido galerista suizo, vio mis dibujos en uno de sus viajes a Barcelona. Le gustaron y contactó conmigo para formar parte junto a otros dibujantes de la ciudad en el stand 'Always Barcelona'.

- Y ahora incluso pinta pianos.

- Sí, ja, ja. Dentro de las actividades paralelas de la feria varios artistas pintamos unos pianos que se mostrarán en la fiesta de la música en Ginebra. Para mí fue un gran reto pero el resultado fue muy satisfactorio.

- ¿Esta publicación permitirá al público descubrir el trabajo anterior de Pedro Espinosa, más allá de su faceta como dibujante de caricaturas en prensa diaria?

- Eso parece. Para mi sorpresa ha habido un repunte de 'Loco' (hasta ahora, tal vez es su obra más representativa, publicada por Astiberri en el 2005). He vuelto a despertar interés. En cuanto a la caricatura, aunque también he hecho publicidad o ilustración, es cierto que cuando intento hacer cosas menos caricaturizadas a veces no me salen. Para mí en principio la caricatura era como un divertimento, pero quizá al final sea una manera mía de ver también la realidad. En el libro también hay un poco de este componente.

- Ahora que se habla tanto de la fuga de talentos a otros países, ya hubo una generación anterior en La Rioja, la suya, que tuvo que buscarse la vida en Madrid o Barcelona. ¿Cómo vivió esa experiencia?

- Con cierta naturalidad. No se trataba tanto de dejar la ciudad, que yo nunca la he querido dejar, como buscar el lugar donde poder hacer lo que te gusta. Si quieres ser astronauta en Logroño, como no pongan una base espacial, va a ser difícil. No obstante, veo que en Logroño -voy a menudo tanto por cuestiones familiares como profesionales- hay un cierto resurgir cultural, gente que está empezando a sembrar poco a poco, sin grandes presupuestos, pero que está moviendo la ciudad.

- ¿Para cuándo la presentación en Logroño?

- Estoy en contacto con la Casa del Libro para presentarlo en Logroño el próximo mes de junio, pero no hay fecha fija. Me gustaría que tuviera tanto éxito como la que realizamos en la Librería Jaimes de Barcelona, en la que estuve acompañado por el escritor Javier Pérez Andújar (autor de 'La noche fenomenal'), quien leyó un texto lleno de sabiduría y aprecio.