El día que Cuerda quiso ver como Azcona

«El día que le entregamos el premio dijo que había tenido la suerte de haber compartido muchas horas con un genio. Aquel día yo tuve con Cuerda la misma sensación que sentí al conocer a Azcona», elogiaba este martes Chechu León, uno de los impulsores del Octubre Corto desde la Asociación de Vanguardias Arnedanas Octubre Corto.

En su decimoquinta edición, se quiso reconocer la «especial vinculación» que mantuvo Cuerda con Rafael Azcona, además de aplaudir «su gran contribución al cine español». Así, el festival recordó el trabajo de ambos en 'El bosque animado', 'La lengua de las mariposas' y 'Los girasoles ciegos'.

Además, el vestíbulo del Teatro Cervantes acogió una exposición de imágenes que realizó Felipe López sobre la foto fija del rodaje de 'Amanece que no es poco', película icónica que también se proyectó en aquella edición.

Junto al cine, en el emocionante acto en el Teatro Cervantes y mostrando su total admiración por los caldos riojanos, Cuerda también se acercó al mundo del vino. Dirigió una cata con vinos de su bodega, la gallega Sanclodio, que maridó con un homenaje a 'El Padrino', película que fue protagonista del cartel anunciador de aquella edición del Octubre Corto.

Desde aquel encuentro, la organización de Aborigen ha mantenido un contacto constante con el cineasta, que les ha ido facilitando teléfonos de amigos y puesto en contacto con otros personajes para que acudan al festival..., y sus integrantes le han llegado a visitar en su casa...

«Era una persona muy campechana, muy cercana, con una energía potente, muy humilde... Se mostró muy interesado en todo lo que le enseñamos y contamos de Arnedo. Y creo que no tenía en su cabeza el legado que va a dejar su figura en el cine español», recuerda Chechu León.