«A Chanel la conocimos con 18 años y ya despuntaba»

«La conocimos con solo 18 años, cuando participaba en Barcelona, en el musical 'Mortadelo y Filemón', la capitana del ballet nos la recomendó, nos dijo que despuntaba y que ya nos hablaba de la versatilidad que le caracteriza». Los hermanos riojanos tomaron nota. A partir de entonces, llegaron varias colaboraciones en espectáculos para empresas como queda constancia en la web de la compañía riojana (Perfordance.com), donde, entre otras intervenciones, se puede ver a una jovencita Chanel bailando en un evento de una entidad financiera protagonizado por Pau Gasol.

Carlos describe a Chanel como una chica que es tal y como se muestra. «Su carácter es alegre, pero también es conciliadora y generosa. Es un alma blanca, absolutamente guapa en todos los sentidos», destaca el exitoso coreógrafo y productor, quien, además de sus dotes como cantante y bailarina, asegura que también deslumbra en su faceta como actriz, un camino al que él personalmente le animó explorar. «Si destacaría algo de ella, sería su capacidad actoral, es una excelente bailarina», pero hay mucho más que conocer de ella. Como recuerda, su rostro lleva años apareciendo en la pequeña pantalla».

Cuando tenga ocasión de llamarle - hace tiempo que no lo hace-, dice que le animará a dar el salto al mercado latino, en EEUU. «Ahí tiene su hueco absolutamente. Aquí ya ha demostrado lo que tenía que demostrar y ahora las metas que se tiene que poner tienen que estar en otros escenarios mucho mayores y con mas posibilidades de las que le podemos proporcionar en este país, muy deficitario a nivel técnico». Sobre el fenómeno Chanel dice que «no es un diamante» encontrado por casualidad, sino que forma parte de una nueva corriente de jóvenes talentos «con una preparación brutal», aunque muchas veces sin descubrir por la falta de oportunidades. «Yo que estoy al pie del cañón a nivel de cásting y en contacto con artistas, muchas veces nos vemos con dificultades para encontrar artistas, porque se van», deberíamos cuidar más lo que tenemos, nos hemos convertido en un país emigrante de artistas», resume.

Anna y Carlos López Infante, que se iniciaron en la danza en la academia de Aurora Infante, su madre, han llevado el nombre de La Rioja por distintos escenarios de nuestro país y del mundo, donde han competido y ganado no pocos galardones de dance-show. Ahora están involucrados en una serie de espectáculos en Tenerife en un proyecto pionero en España que aúna cultura y turismo. Con este proyecto llevan cuatro años de forma estable. «Ahora estamos renovando el espectáculo poco a poco, tenemos cinco propuestas diferentes semanales al nivel de Las Vegas, con una gran aceptación entre el público». Además, avanza lo que es todavía un proyecto embrionario, pero que marcha por buen camino: un musical, que sería el segundo de los hermanos a quienes la pandemia no les ha frenado el ritmo de trabajo.