Artes marciales, pizza y muchos tortazos

Muy pocos personajes de ficción gozaron de tanta fama y popularidad como las 'Tortugas Ninja' en los años noventa. Surgidas en el mundo del cómic, las aventuras de Leonardo, Raphael, Michelangelo y Donatello entretuvieron a varias generaciones de chavales a través de su serie de dibujos animados, más tarde con sus películas y, por último, con los videojuegos.

Las 'Tortugas Ninja' eran unos personajes mutantes muy divertidos, que adoraban la pizza, sabían artes marciales gracias a su maestro Splinter y luchaban contra el crimen organizado en Nueva York, algo así como los justicieros de la ciudad. Estuvieron muy de moda durante mucho tiempo, lo que aprovecharon a nivel comercial para vender juguetes, camisetas y, por supuesto, películas. Así que tras tener éxito en la grande y en la pequeña pantalla, era obvio que el siguiente paso eran los videojuegos.

Ahora, el desarrollador Tribute Games y DotEmu homenajean a aquellos juegos que tanto éxito tuvieron y que, a pesar de algunos intentos recientes tanto en el cine como en el canal Nickelodeon, no han vuelto a gozar de aquella popularidad noventera.

'Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder's Revenge' pertenece a un género que nos brindó grandes alegrías y éxitos en los años noventa, el 'Beat them up' o, en español, 'Yo contra el barrio'. Surgido de los míticos juegos arcade de lucha como 'Street Fighter', 'Mortal Kombat' o 'King of fighters', el 'Beat them up' aporta movimiento a aquellas pantallas estáticas de lucha uno contra uno y le da la posibilidad al jugador de recorrer diferentes lugares mientras aparecen oleadas de enemigos. Para terminar cada una de dichas fases o pantallas, los jugadores suelen tener que hacer frente a un jefe final o 'boss'.

Afortunadamente, esta aparente sencillez, al menos en cuanto a la mecánica jugable, ha sabido sobrevivir estos años con sagas tan reconocibles como 'Street of Rage', un clasicazo tanto de consolas como de máquinas recreativas.

A la recuperación de estos personajes icónicos hay que añadir la estética 'Pixel Art' elegida para los gráficos, que todavía le da un aire más retro y, por supuesto, constituye todo un acierto. De hecho, muchos juegos nuevos como 'Final Vendetta', que revisaremos en estas páginas próximamente, utilizan este mismo estilo visual en un intento por contentar a los clásicos, pero también por atraer a nuevas generaciones de jugadores.

Esta nueva entrega de las 'Tortuga Ninja' viene de las mano de la compañía francesa DotEmu, que ya distribuyó 'Streets of Rage 4', título del que han incorporado ciertas mecánicas para darle una vuelta de tuerca muy interesante. 'TMNT: Shredder's Revenge' contiene un muy bien balanceado sistema de dificultad, algo que sobre todo agradecerá el jugador no experto en el género.

Además la variedad de los escenarios permite mejorar la jugabilidad de los combates, ya que podemos utilizar elementos externos presentes en los decorados. Dichos combates ganan en espectacularidad a la vez que vamos aprendiendo nuevas habilidades para los personajes y los subimos de nivel.

Se puede completar el juego con las cuatro tortugas ninja, con el maestro Splinter, con la reportera April y, aviso de spoiler mediante, con el mítico Casey Jones, cuyo personaje se desbloquea una vez terminada la historia principal por primera vez. Por supuesto, si la experiencia final entretiene en el modo un jugador, es en el componente cooperativo donde alcanza su esplendor, con hasta cinco jugadores a la vez repartiendo leña por las calles de Nueva York.

Así pues, 'TMNT: Shredder's Revenge' no solo se dirige a aquel público que creció con las aventuras de las cuatro tortugas, sino que su sencillez y su jugabilidad lo convierten en ideal también para las nuevas generaciones de jugadores. Además, su bajo precio, su disponibilidad para todas las plataformas y su inclusión desde el mismo día de su estreno en el catálogo de 'Xbox Game Pass' no hacen más que acercar el título a la mayor cantidad posible de usuarios. De momento, uno de los imprescindibles de lo que llevamos de 2022, a pesar de su corta duración.