El Museo de Bellas Artes recibe en julio un 70% más de visitantes que el año pasado

Los porcentajes en relación a la procedencia del público manifiestan diferencias sobre las proporcionadas por el Guggenheim. Mientras el 9% de los visitantes de la sede bilbaína son locales, en el caso de la pinacoteca llegan al 25% y el resto del Estado alcanza el 28%. En cualquier caso, la presencia extranjera sigue siendo relevante, con un 46% del conjunto total.

La entidad sigue inmersa en su proceso de reforma y ampliación y se mantienen los plazos previstos. Su actividad no ha cesado, a pesar de los inconvenientes generados por esta situación. Además, este verano cuenta con varios alicientes que se suman al atractivo de su colección permanente. El programa de la Obra Invitada está dedicado a Joaquín Sorolla, representado por 'Bajo el toldo. Playa de Zarauz', y la iniciativa Multiverso, empeñada en la difusión de la creación videográfica, recoge el proyecto 'El trayecto+The Track', a cargo de Mabel Palacín.

La restauración es otra de las facetas que identifica al Museo. Durante este año, dará cuenta de sus actividades de conservación con la exhibición de obras que han recuperado su estado inicial gracias al equipo técnico de la institución. La relación es muy heterogénea e incluye piezas de Txomin Badiola, Hermen Anglada Camarasa, Julio González, Alberto Arrue y el recientemente fallecido José Antonio Sistiaga.