Activismo

La institución riojana retoma la fortaleza combativa del documental para ofrecer al espectador la pieza que obtuvo el León de Oro en el pasado festival de Venecia. Un reconocimiento que pone en valor el auge y el tañido pluridimensional del género. Además de llenar de luz un metraje abordando tenaces trayectorias de figuras en lucha contra el sistema y las injusticias.

En este caso, Poitras, responsable de trabajos de merecido prestigio como 'Citizenfour' (2014) –Oscar al mejor documental–, sigue la estela de Nan Goldin, fotógrafa de estilo realista autodescriptivo que mantuvo una enconada pelea contra la farmacéutica Pardue Pharme, propiedad de la familia Sackler, productora del opiáceo OxyContin, del que la realizadora y activista era adicta.

La de Boston, muy apasionada y reivindicativa en su estilo, le gusta plantear realidades entre rivales de desigual fuerza y abrir frentes contra el poder. David contra Goliat. Aquí sigue el hilo conductor de Goldin estructurando su odisea en seis bloques que abarcan aspectos relativos a su vida íntima, profesional y asociativa. Desde una infancia infeliz con una familia disfuncional, sus crónicas fotográficas, su crudo testimonio como víctima de la violencia doméstica hasta la superación de la adicción al medicamento.

Un recorrido intenso, lleno de imágenes y fotografías de archivo que ilustran, con muchos vaivenes temporales en su entramado secuencial, la fe inasequible al desaliento de una mujer empeñada en denunciar los desmanes de salud de una empresa que acumuló un beneficio millonario con la toxicidad de su mercancía.