«Me gusta hablar del mal como entidad»

-Han pasado cinco meses desde que ganó el Planeta. ¿Cómo vivió ese momento?

-Fue muy especial para mí porque se daban un montón de circunstancias en mi vida privada y sabía lo feliz que iba a hacer a mi familia. Tú ya tienes el reconocimiento del público, así que un premio es lo que puedes ofrecer a los que han creído en ti, a los que te han apoyado. Es algo que ellos también reciben.

-Lo ganó sólo cuatro años después de publicar en España 'El guardián invisible'. ¿Llegó a imaginarlo en algún momento?

-Yo ya tenía una trayectoria, había ganado pequeños concursos literarios y había publicado una novela en una editorial con la que tuve una mala experiencia. Con 'El guardián invisible' decidí buscar un agente que llevó el libro a la Feria del Libro de Frankfurt en 2011 y triunfó. Durante ese tiempo se vendió a diez países antes de publicarse en España en 2013 e incluso se vendieron las derechos de la película.

-Al igual que en la trilogía, la trama gira en torno a la familia, la infancia traumática, el amor... Hábleme de ello.

-Cuando termino una novela, deja de ser mía y se dan múltiples interpretaciones, todas ellas válidas porque parten del punto de vista del lector y de su experiencia vital. Yo quise hablar de una historia de amor, de los secretos, de la confianza, de hasta que punto llegamos a saber del todo a quién tenemos a nuestro lado... Y también ha sido un homenaje a una de mis novelas que más me han influido, 'El Padrino', que trata de la importancia de la familia y la pertenencia a un clan. Es algo explorado en la Trilogía del Baztán con el matriarcado pero que aquí cobra un punto de vista, en lo que se refiere a la obligación que se sucede de modo natural solamente por el nacimiento.

-También toca otros temas importantes: la codicia, la amistad...

-La amistad es el tema central,pero es un homenaje a la amistad adulta. Todos tenemos amigos desde la infancia, pero cuando te encuentras con un adulto que viene con su experiencia vital que te acepta con toda la historia que traes a tus espaldas es algo maravilloso. Creo que es uno de los mejores regalos que me ha hecho la vida.

-En sus novelas se pueden distinguir tres tipos de personajes: los realmente malvados, los débiles y los que, a pesar de todo lo que les ha tocado vivir, son fuertes.

-Es algo en lo que creo. Me gusta hablar del mal como entidad, como algo que puede medirse y pesarse, que es una realidad. Luego están los personajes débiles, que nutren la cantera del mal y por supuesto los que han aprendido de circunstancias hostiles pero que han aprovechado sus circunstancias de vida y van en positivo.

-¿Por qué son tan importantes los escenarios en sus obras?

-Es cierto que el escenario llega a tener gran influencia sobre el comportamiento y modo de vida de los personajes y eso es porque no busco una belleza de postal, sino la belleza extra de los paisajes que tienen una gran exigencia. Siempre me han llamado la atención a nivel antropológico los asentamientos humanos en lugares hostiles y tanto Ribeira Sacra como Baztán son lugares de gran potencia espiritual.

-Se habla mucho de su trilogía, pero¿qué me dice de su primera novela, 'Los privilegios del ángel'?

-Tiene todo lo bueno y malo de una primera novela, tiene toda la frescura pero también hay muchas cosas mejorables. Cuando la releo la encuentro fresca, pequeña, embrionaria, bonita... y la amo mucho por eso.

-¿Qué está escribiendo ahora?

- Siempre parto de una historia que lleva mucho tiempo viviendo dentro de mí, creo que no he escrito nada que haya estado menos de seis años en mi cabeza, pero a lo largo del proceso creativo surgen muchos cambios. Cuando esté lista lo contaré.

-¿A qué atribuye el gran éxito que tuvo la trilogía?

-Fue sorprendente. Se ha traducido a 40 idiomas. Todos los planteamientos tan locales que llevaron a algunas editoriales a rechazarlo: tratar el matriarcado del norte de una manera muy íntima, tener la osadía de mezclarlo con la mitología y el hecho de que la trama estuviera relacionada con la investigadora, fueron precisamente lo que hizo que funcionara. No sé si se sabe, pero la historia se basa en un crimen real que cometió un grupo satánico que se asentó en los 80 en la zona.

-¿Qué le ha parecido la adaptación de la película? ¿Es Marta Etura su Amaia Salazar?

-Creo que es una muy buena adaptación, les ha sostenido todo el rato la intención de ser fieles. Partíamos de que Fernando García Molina era fan de la novela antes de acometer la adaptación y eso me hizo confiar. Me permitió asistir al rodaje, estar cerca, conocer a los actores... Ha sido para mí una experiencia divertida porque el cine es muy distinto a la creación literaria, nada que ver con mi mundo pequeñito de escritora. En cuanto a la actriz, Marta Etura está perfectamente a la altura.

-¿Qué sintió al leer los mensajes de intento de boicot a la película?

-Hubo un primer momento de desconcierto y de enorme susto, pero también casi a la vez empezaron a llegar otros mensajes que diluían los primeros. Enseguida se alzaron otras voces que me hicieron recuperar muy rápido la fe en la gente y todo volvió a su cauce. La película está siendo muy vista y está gustando muchísimo. Sobre todo para mí era importante que mis lectores encontraran el espíritu del libro, que no se sintieran traicionados.