Las cuatro parroquias del Casco Antiguo de Logroño se agrupan ante la falta de curas

logroño. La Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño ha instaurado en Logroño la Unidad Pastoral del Casco Antiguo, que agrupa a cuatro iglesias parroquiales: Santa María de La Redonda, Santiago El Real, Santa María de Palacio y San Bartolomé. «Esta es una de las primeras unidades pastorales que entra en funcionamiento en La Rioja», asegura el portavoz de la diócesis riojana, Justo García Turza. Esta medida, explica, «se debe a la escasez de curas» y tendrá que ir aplicándose paulatinamente al resto de la diócesis.

Los párrocos encargados de esta unidad pastoral serán los sacerdotes Luis María Centeno Pérez, José Ignacio Díaz Pérez y Manuel Íñiguez Ruiz-Clavijo, siendo este último el director de la misma.

Las unidades pastorales «son agrupaciones destinadas a que ninguna parroquia, por pequeña que sea, se vea desatendida», explica García Turza. «La misa -añade- la podemos atender todavía en todos los pueblos [174 municipios y 220 parroquias en toda la comunidad], ya que ahora estamos 220 sacerdotes, la mayoría de edad avanzada y 150 ya jubilados. Desde estas unidades pastorales se facilitará la atención de la catequesis, atención a enfermos, preparación de novios, funerales, etcétera... Todo aquello a lo que el cura no llega, excepto la misa y la confesión. Todo lo demás lo puede hacer un laico».

Así, el semanario diocesano Pueblo de Dios recoge a este respecto que la normativa canónica de la Iglesia tiene previsto que «cuando así lo exijan las circunstancias, la cura pastoral de una o varias parroquias puede encomendarse solidariamente a varios sacerdotes, con tal de que uno de ellos sea el director de la pastoral, que dirija la actividad conjunta y responda de ella ante el obispo».

Y añade Pueblo de Dios que, «dada la situación que viven muchas parroquias, sobre todo las más pequeñas, y dada la disminución progresiva de sacerdotes, ya desde la celebración de nuestro Sínodo Diocesano (años 1999-2002), se vio la conveniencia de crear estas unidades pastorales, esto es agrupaciones estables de varias parroquias, confiadas a un grupo de sacerdotes con la corresponsabilidad de laicos y religiosos». La participación de los laicos se considera importante para esta medida.

Otros cambios ordenados por el obispo Juan José Omella tras la última remodelación de la diócesis riojana, que se produjo a mediados de septiembre, fueron: párroco de San Francisco de Asís, Juan Ramón Mateo Argomániz; OFM y vicario parroquial, José Luis Álvarez Barandalla; OFM, párroco de las localidades de Villoslada de Cameros, Lumbreras, San Andrés, Villanueva, Pradillo, Gallinero y Aldeanueva de Cameros, Jesús María Ortega Solana; e Ignacio María Insausti Echevarría, vicario parroquial de la iglesia de María Inmaculada de Logroño.