El torero Marc Serrano denuncia una agresión de antitaurinos

"Posiblemente haya sido el hecho más desagradable que haya vivido en mis 15 años de alternativa, además es la primera vez que un profesional sufre una agresión directa por parte de cuatro indeseables, que, lejos de amar y defender a los animales, como ellos proclaman, lo que hacen es coartar libertades a golpe de violencia", ha señalado hoy Marc Serrano.

Serrano (Nimes, sureste de Francia, 1978) ha relatado que tras finalizar la comida con varias personas, cambió de establecimiento para tomar un café, y fue en ese momento cuando se "percató" de que había antitaurinos por la zona.

"Los problemas empezaron cuando, a la salida del bar, nos metimos por una calle en la que hay unos 20 miembros del CRAC (grupo antitaurino radical de Francia). Uno de ellos se dirige a nosotros a preguntarnos que a dónde íbamos, y al no responderle y pasar de largo, entendió que íbamos a los toros, y en ese momento comenzó a perseguirnos y a llamarnos de todo", ha recordado.

Momentos "muy incómodos" que se convirtieron en una persecución, en la que el sujeto agresor les ultrajó a "escasos centímetros" de la cara con un megáfono en claro signo de "provocación". "Ni reaccionamos contra ellos ni entramos en ningún cruce de palabras", ha matizado Serrano.

"La agresión física vino cuando me percaté de que hay una señora grabando toda la secuencia, una táctica que utilizan los 'antis' para esperar la reacción del agredido, y, con un poco de suerte, revertir la situación, poniéndonos a nosotros como los violentos, los salvajes, los malos de la película", ha apostillado.

Tras esta experiencia, el diestro, como ha señalado, decidió "hacer lo mismo que ella", y sacó su móvil para grabar lo que estaba ocurriendo. "Ahí noto un fuerte golpe en la nuca que me derriba, y, una vez en el suelo, me pegan una patada en la mano donde tenía el móvil para que no captara nada", ha puntualizado.

Además de la violencia física que sufrió el torero galo, lo más preocupante para Serrano fue "la impasibilidad" de las fuerzas de seguridad francesas, en este caso la gendarmería, que fueron testigos directos de los hechos, "sin que tomaran las medidas oportunas hasta prácticamente al final" cuando ya el diestro había sufrido la agresión.

"Ese fue el único momento en el que me alteré. Me pareció vergonzoso que, después de haber visto todo, no actuaran hasta que me golpearon. Si me sacan un cuchillo, ¿no habrían intercedido hasta que me lo hubieran clavado?. La situación es alarmante, parece que tiene que pasar una tragedia para empezar a actuar con coherencia y aplicar las leyes por igual para todos", ha concluido Serrano.

Este episodio vivido por Marc Serrano no es el primero de violencia antitaurina que se da en Francia.

Este año un grupo de activistas "anti corridas" vertieron un cubo de pintura al rejoneador Andy Cartagena momentos antes de actuar en Palavas, provocando daños a uno de sus caballos, e incluso el presidente del Observatorio de las Culturas Taurinas de Francia, el torero y fotógrafo Andre Viard, sufrió un atentado en el año 2011, cuando trataron de incendiar su casa con él y su familia dentro.