El Reina Sofía exhibe la primera gran retrospectiva de Carl Andre

La exposición 'Carl Andre: Escultura como lugar, 1958-2010' representa la primera retrospectiva en España de este artista nacido en Quincy (Massachusetts, EE UU) en 1935. La muestra, organizada por la Dia Art Foundation de Nueva York en colaboración con el Museo Reina Sofía, consta de 400 unas piezas, entre esculturas y un abundante número de series de poesía visual y concreta realizadas por Andre en los últimos 50 años.

La exposición permite al visitante seguir cronológicamente tanto las innovaciones del artista en el terreno de la escultura -incluida su personalísima aproximación a los materiales y al espacio y su rompedor concepto de composición a través de unidades mínimas-, como su producción poética, íntimamente conectada con la obra plástica pero también eclipsada en cierta manera por ella.

Por primera vez en 20 años se presenta un grupo excepcional de objetos titulados Dada Forgeries, que reflejan la vinculación del artista con los 'ready-made' de Marcel Duchamp, un autor que influyó en el estadounidense tanto como Constatin Brancusi.

Inclasificables y ensamblajes

 Esta antológica se articula en tres secciones. Una, dedicada a la escultura, está ubicada en su mayoría en el Palacio de Velázquez; las otras dos, que agrupan, por un lado, las creaciones inclasificables de Andre -como sus objetos efímeros y postales así como su serie de ensamblajes Dada Forgeries- y, por otro, la poesía visual, se presentan en la tercera planta del edificio Sabatini.

Andre abogó por un revolucionario concepto de composición mediante el empleo de unidades mínimas de materiales y una singular exploración del espacio. Desarrolló una trayectoria en la que presenta las preocupaciones formales de su época, como es la apropiación, lo inalterado, la estandarización de los materiales industriales, el uso de formas geométricas desnudas, la eliminación de la huella subjetiva del artista en su obra o la introducción del concepto de 'site-specific'.