«A mayor información, mayor libertad»

El veterano periodista ha comenzado refiriéndose a la importancia y el valor que han tenido las palabras desde el inicio de la civilización (hasta el punto de que en Grecia estaban permitidas solo a los hombres libres), pero sobre todo se ha extendido sobre el uso responsable que deben hacer los periodistas. El periodista debe utilizar la palabra bajo la certeza de que, a mayor información, mayor libertad, ha señalado para advertir en otro momento del riesgo que advierte en el uso del nuevo lenguaje digital. Teme que el idioma original se desvirtúe como consecuencia de los nuevos recursos lingúisticos, y el manejo continuado del inglés técnico.

Darío Restrepo ha afirmado que en la necesidad de la comunicación está el abrirse al otro, también dar lo mejor de sí... y en esto está en cierto modo también el origen del español, al que ha hecho sucesivas referencias como cuando ha mencionado su emoción al encontrarse en la tierra donde surgieron los primeros testimonios o ha citado a Gonzalo de Berceo, primer autor que escribió en español en los siglos XII y XIII.

Dentro de las continuas vinculaciones que ha hecho de la palabra con la identidad de los pueblos, ha destacado la importancia que tuvo el Ramón Paladino en la enseñanza del idioma a personas de memorias rústicas. Es emocionante pensar esto, ha dicho.

El "terror" de los medios

Por otra parte, en declaraciones a la Agencia EFE, Darío Restrepo afirmaba que, "en general, los medios de comunicación están bajo el terror de su posible desaparición, frente a la competencia que les establece lo digital y se preguntan cómo hacer para sobrevivir".

El periodismo actual "está muy dominado por lo digital y, a veces, ese dominio de lo digital impone miedo", ha asegurado Restrepo, quien acumula más de cincuenta años de experiencia en diversos medios de prensa escrita y televisión y ha recibido los principales premios periodísticos de América Latina.

Ha considerado que "muchos periodistas, sobre todo los de mayor edad", tienen "una cierta ansiedad ante lo digital de que no lo van a dominar del todo y que la tecnología les va a dominar, que es lo peor que le puede suceder a un periodista".

También ha dicho que, ante esta situación de "una gran crisis de identidad por parte de los medios frente a lo digital, hay una coyuntura muy favorable y es que el periodista está sintiendo la necesidad de reafirmar su identidad profesional".

En este contexto, ha considerado que las nuevas tecnologías ponen en mano del periodista un instrumento poderoso que, si se utiliza para emparedar esa opinión, cumple su objetivo social.

Sobre la situación del español, que hablan más de 548 millones de hispanohablantes, Restrepo ha dicho que ve "grandes peligros", ya que "ha entrado en moda un lenguaje restringido", particularmente más generalizado entre las nuevas generaciones, y que tiene como consecuencia la "adicción" a lo digital.

"Personas dispersas"

Para él, este es uno de los peligros del español, ya que cree que las personas adictas a lo digital son "incapaces de concentrarse, son personas dispersas que, al mismo tiempo, están pensando en muy distintas cosas; todo lo tratan superficialmente y la superficialidad está muy ligada a la escasez de palabras".

Restrepo, también catedrático en la Universidad colombina de los Andes, se ha referido en su conferencia a "los poderes de la palabra" y a su conexión con lo ético.

Ha subrayado que "la palabra concede a los periodistas un poder muy especial, que es el poder de cambiar algo todos los días", que es una expresión que dice haber tomado del escritor Gabriel García Márquez, quien señalaba que "ser periodista es tener la oportunidad de cambiar algo todos los días".

En su opinión, "ese cambio tiene que ser en el mayor bien para la comunidad, que es el criterio que guía a un periodista para seleccionar la noticia, las fuentes y las palabras con las que va a comunicar, incluso, para seleccionar el lugar dónde va la noticia, dónde va la edición general".