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E. PASCUAL
Martes, 8 de julio 2014, 11:57
El público del Fárdelej, de todas sus propuestas, ya guarda las imágenes y recuerdos de su segunda edición. Y lo hace poniendo las esperanzas en la tercera del festival de experiencias culturales y musicales de Arnedo. Un tercer capítulo que, como ya anticipaba en su ... presentación en Madrid el consejero de Cultura, Gonzalo Capellán, junto a su organización, será la del despegue total al crear sinergias con la celebración en el 2015 de la exposición La Rioja Tierra Abierta en la ciudad del calzado, que girará alrededor del siglo XX y el nacimiento de la cultura de masas.
El Fárdelej Music & Vida Festival es un buen reflejo de varios de los pilares de la cultura pop, desde sus actividades gastronómicas a las turísticas y, por supuesto, las musicales, colofón al que llegó en la noche de este sábado. Fue la segunda jornada musical, la que plasma la apuesta de la organización por que el festival crezca hasta ser referente.
Tras la propuesta de aires diferentes de Joe La Reina y los medios tiempos épicos de Elefantes, la noche del sábado se adentró a la diversión pura con Varry Brava. Quienes no los conocía poco a poco quedaron atrapados por su atrevimiento festivo, con una estética que evocaba a la Movida, y un afán hedonista que finalmente convirtió la pista del Arnedo Arena en una sala de baile. Sus ritmos funkys con la rítmida intensa característica de los 80 junto a una puesta en escena enérgica a través de los temas de su 'Demasié' engancharon al público a la fiesta definitiva, que rompió con la despedida de 'No giras'. Todo el Arnedo Arena acabó alborotado.
Pero si había un grupo esperado esos eran los madrileños Izal. Con el doble de audiencia que en la jornada del viernes, el Arnedo Arena ofrecía una animada panorámica de la pista cuando la banda arrancaba con 'Despedida', la apertura de su segundo disco, 'Agujeros de gusano', con el que se han propulsado a ser uno de los nombres de este año gracias a una gira de lleno tras lleno.
Izal tienen ese algo más que les diferencia de muchas de las bandas de la escena pop nacional actual. Ese algo que sólo tienen unos cuantos y que logra conectar con el público directamente. El suyo fue el concierto del Fárdelej de más complicidad, de implicación total entre público y banda, como plasma su himno 'Qué bien' y el confetti volando por los aires. Uno a uno, desde Mikel a la cabeza a Ale Jordá haciendo temblar su batería, el quinteto se lo pasa en grande en escena, lo que contagió al público para entregarse por completo a sus canciones. Porque Izal no es grupo de una canción: el público vive y canta todas, como 'Tu continente', el ya himno 'Asuntos delicados' o 'Magia y efectos especiales' que nombraba su debut. Sobre el escenario del Fárdelej demostraron por qué han convencido al público de todo el país y acabaron con todos los brazos en alto cantando y bailando 'Prueba y error' y 'La mujer de verde'.
Llamando a estrujar las últimas fuerzas, Elyella Djs cerraron el Fárdelej con una sesión que arrancó con intensidad profunda, explotó con fuego y puso a bailar a todo el público con temas de éxito actuales, como de Two Door Cinema, hasta clásicos pasados por su coctelera de rock maridado con electrónica. Fueron los últimos bailes.
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