Borrar
Solitario. «Ni he estado casado ni tengo novia ahora mismo».
«Me veo un poquito raro»

«Me veo un poquito raro»

«Las mujeres son grandes domadoras y han intentado domarme, pero conmigo no pueden»

ARANTZA FURUNDARENA

Sábado, 14 de junio 2014, 22:44

El hijo de aquel humilde vendedor de ajos y cebollas ha resultado ser un hombre del Renacimiento. Jordi Mollà Perales (Barcelona 1968) es actor, pintor, escritor, guionista, director de cine... Y, por encima de todo, un ser peculiar y algo solitario. Acaba de protagonizar el spot internacional de Bacardí: 'Indomable desde 1862'.

¿Qué tiene usted de indomable?

En el buen sentido muchas cosas. En el malo, ninguna. Un indomable puede ser interpretado como un intratable.

Y no es su caso.

Eso intento. Yo soy indomable en mi parte inconformista y mi lucha por abarcar otros campos.

Ha escrito dos libros y pinta desde hace 20 años.

Y he dirigido dos películas, he escrito varios guiones y soy un actor que trabaja en distintos mercados, que a veces hace de bueno, a veces de malo, habla varios idiomas...

Completito, usted.

Sí, bueno, detrás de ello solo hay...

Que no lo puede evitar, como diría John Malkovich.

Exacto. No lo puedo evitar. 'It is beyond my control', como decía Malkovich en 'Las amistades peligrosas'.

¿Le han intentado domar muchas veces?

Muchas. Pero es imposible. Porque es... 'Beyond my control'. Especialmente las mujeres, que son unas grandes domadoras, pero conmigo no pueden.

¿Por qué será que queremos cambiar a nuestra pareja?

Tienden a eso... Pero no me tire de la lengua. Digo por mi experiencia que si alguna ha intentado domarme no lo ha conseguido. Dicho por un psicólogo, las mujeres pueden ponerse celosas de que yo ceda tanto tiempo y tanta energía a la creatividad y no a ellas. Y ahí viene el conflicto.

Así que tiene un conflicto...

No, yo no tengo ninguno, pero es verdad que a mí la creatividad me absorbe mucho tiempo y puedo entender que eso a la persona que esté cerca de mí, hablando mal, le toque los huevos. Pero no hago daño a nadie. Si no le dedicara tiempo a esa persona porque estoy haciendo el golfo, pues vale, pero no es el caso. Y en el terreno profesional igual, siempre ha existido el lema de zapatero a tus zapatos. Cuando me preguntan si soy actor, pintor o escritor, siempre contesto: yo soy un supermercado.

Y dice que dedica más tiempo a la creatividad que a sus relaciones personales.

Más incluso que a mí mismo.

No tiene hijos.

No, ni he estado casado, ni tengo novia ahora mismo.

¿Es un solitario?

Pues no es que me guste mucho la soledad, pero como decía Picasso: 'Puedo ver a cualquier persona de cuatro a cinco'. Luego necesito volver a lo mío.

Le habrán llamado raro.

Desde que tengo uso de razón. Siempre, en cualquier contexto, lugar, escuela... El raro. Pero ser el raro me ha dado muchas posibilidades de ser libre y de hacer lo que me da la gana.

¿Usted se ve raro?

Yo... Un poquito. Pero tampoco como para espantar a nadie.

¿Le ha comprado algún cuadro Johnny Depp?

Hace años nos intercambiamos un cuadro. En el suyo pone 'Hermano', y quiero pensar que ese es el título.

Está rodando en Italia 'Latin Lover'. ¿Ese es su papel?

No. Ese es un chulazo italiano ya mayor, pero mi personaje también tiene algo de 'latin lover'. Y me divierte porque al 'latin lover' al final se le ve a mil kilómetros. Es hasta ingenuo.

Ha hecho de pijo, de yonqui, de Felipe II, Gil de Biedma...

Tengo especial cariño por Jaime Gil de Biedma y por Daniel Expósito, el de 'La buena estrella'.

Le va el malditismo.

Creo que detrás de eso hay personas indefensas que están pidiendo una caricia.

Tal vez el solitario Jordi Mollà esté pidiendo una caricia.

Pues seguramente. Pero una caricia sin transacción comercial, sin peaje.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja «Me veo un poquito raro»