Un joven muere tras una brutal agresión con un destornillador en un parque de Bilbao

Este último ataque se produjo también en el conocido como 'parque de los patos' a primera hora de la mañana del pasado domingo 15 de octubre, justo un año después de que el mismo individuo quedara en coma por la paliza anterior. Esta vez, un ciudadano avisó a la Policía autonómica de que un hombre había pinchado a otro. Cuando llegaron las primeras patrullas al lugar, los agentes encontraron al joven, al que conocían de otras actuaciones, sangrando por la cara y en estado grave. No respondía a los estímulos ni articulaba palabra; se encontraba semiconsciente.

Según la versión facilitada por varios testigos de los hechos, alguien había visto al herido intentando robar alguna de sus pertenencias a un hombre que dormía en la pérgola de Doña Casilda. El testigo empezó a recriminarle que se aprovechara de la situación para sustraerle sus cosas. La víctima del robo se enteró y le persiguió con un destornillador de grandes dimensiones hasta que le alcanzó y terminó agrediéndole.

El herido fue trasladado de urgencia hasta el hospital de Basurto, donde quedó ingresado en estado grave. Allí permaneció durante cinco días hasta que falleció a causa de las heridas sufridas, el pasado día 20 de octubre. Según el informe preliminar de la autopsia practicada al cadáver en el Instituto vasco de Medicina Legal, el paciente falleció a causa de las lesiones producidas con el punzón en la cara, por lo que el hecho ha sido considerado como una muerte de etiología homicida.

El mismo día de los hechos, los ertzainas detuvieron al hombre, de 48 años, que según los testigos, había agredido a la víctima después de sorprenderle intentando sustraerle algo del bolsillo mientras dormía. El presunto agresor solía empujar un carro, donde los policías localizaron diversas herramientas, entre ellas destornilladores. Inicialmente, la imputación fue por un delito de lesiones con un objeto punzante.

Se da la circunstancia de que Y.S., de 22 años y natural de Marruecos, ahora fallecido en este segundo incidente, ya había permanecido varios días en coma justo un año antes a causa de otra salvaje agresión. Sucedió el pasado 12 de octubre de 2022. Alrededor de las cuatro y media de la madrugada, un grupo de cinco chicos la emprendieron a golpes contra él al percatarse de que estaba intentando sisar algo a uno de ellos. Un miembro de otra cuadrilla, asustado por la paliza que le estaban propinando, avisó a la Policía.

Los agresores huyeron dejando al herido tendido en el suelo. Agentes de la Policía Municipal, que contaban con un desfibrilador semiautomático en el coche patrulla lograron reanimarle cuando ya no tenía pulso y fue trasladado en ambulancia hasta el hospital de Cruces, donde estuvo ingresado. El joven se recuperó y volvió a la calle.

Dos de los presuntos agresores fueron detenidos e ingresaron en prisión preventiva en Basauri varios días después de apalear a la víctima, aunque enseguida recuperaron la libertad a la espera del juicio. Se les acusaba de lesiones y omisión de socorro. Los otros tres sospechosos también estaban identificados por la Ertzaintza.