La tienda de la calle Guardia Civil realiza envíos a toda España
La tienda de productos riojanos y vinoteca ‘Tierra de Sabores’ se ha convertido en una pequeña embajada sensorial de La Rioja en la calle Guardia Civil
El próximo 7 de septiembre, la tienda y vinoteca ‘Tierra de Sabores’ cumplirá ocho años. Ana abrió el negocio después de contar con una experiencia de cerca de 30 años en el mundo del vino, y viendo que su hija Vicky compartía con ella el interés por ese producto tan típico de La Rioja.
Buscó un local lo más céntrico posible y también pensando en que sus potenciales clientes habían de ser, principalmente, aquellos que pernoctaban en los hoteles de la capital. Aunque no consiguió un local en una calle principal sí lo hizo en la calle Guardia Civil, 2 con cinco de los principales hoteles de Logroño muy cerca de ello.
Y con mucha ilusión, Ana abrió el local, aunque al principio las cosas no fueron como pensaba. «El mundo del vino es tradicionalmente muy masculino, y había cierto recelo cuando veían que la que llevaba la vinoteca era una mujer», recuerda Ana. «Las bodegas que venían a ofrecer su vino entraban a la vinoteca y me preguntaban por el responsable, cuando les decía que era yo, se sorprendían de tener que hablar de vinos con una mujer. Pero es que había gente que venía a comprar y hacían la misma pregunta, querían tratar con el jefe, cuando les decía que era yo, hubo algunos que incluso se iban»
Afortunadamente, Ana reconoce que después de ocho años, las cosas van cambiando porque ya se han ganado el respeto de las bodegas y se han hecho un nombre entre los clientes.
También la vinoteca ha cambiado. «Cuando abrimos la tienda contábamos con unas 100 referencias de vinos y 30 de otros productos gourmet de La Rioja; ahora contaremos con unas 350 referencia vinícola y una 80 de otros productos, y siempre con un 95% aproximadamente de producto riojano», comenta Ana que explica que «el 80% de nuestra clientela son turistas, pero también hay gente del barrio que viene aquí a comprar vino aunque sea más barato y de cosechero, y lo que estamos viendo ahora es que también comienza a venir gente joven que aprecia el vino y quiere disfrutar de una buena botella en circunstancias especiales. Eso es algo que no ocurría antes».
La pandemia pillo a ‘Tierra de Sabores’ en pleno despegue. «Habíamos comenzado ya a tener el respeto y la confianza de todo, e incluso organizábamos pequeños eventos como catas y así para darnos a conocer, y no nos iba mal, pero llegó la pandemia y tuvimos que cerrar dos meses, y cuando abrimos, no había turismo que viniera», lamenta Ana, pero ella y su hija Vicky –«que lleva el vino en su ADN porque lo ha mamado desde pequeña»– tuvieron que reinventarse, «y comenzamos a anunciar, a través de las redes sociales, que hacíamos envíos por toda España. No podemos mandar al extranjero porque tenemos muchos problemas con los aranceles».
Eso ha hecho que el negocio siga creciendo porque ahora, muchos de los turistas que visitan Logroño y acuden a su establecimiento mantienen la condición de clientes incluso cuando están en otros puntos de España. «Nos llaman, nos piden, les damos el precio del envío y si les satisface, va para allá».
En otros casos, cuando se trata de clientes presenciales se dejan aconsejar porque «hay quien viene y te pide un vino majo que valga entre 10 y 14 euros la botella, por ejemplo» y es ahí cuando Ana y Vicky sacan toda su capacidad didáctica para explicar las opciones que tienen «a la gente de fuera les cuesta mucho entender lo del vino de autor, porque ven en la contraetiqueta del Consejo el color verde genérico y no acaban de entenderlo», pero ellas tratan de explicarlo.
No es de vino, o de productos riojanos (en la tienda disponen de quesos, embutidos, conservas, patés, mermeladas, dulces...) sino también de los puntos de interés turísticos o incluso de qué bodegas pueden visitar. «La verdad es que nos convertimos un poco en embajadoras de nuestra tierra, y eso a mí es algo que personalmente me enorgullece mucho. Cuando yo decidí abrir esta tienda, tenía claro que quería vender La Rioja, por eso la llamé Tierra de Sabores, porque aquí se encuentran los sabores de La Rioja, y ahí sigue ocho años después».
«Se están haciendo esfuerzos por parte de las asociaciones de comerciantes, y también a veces desde el ayuntamiento con ayudas para mantener el comercio de barrio, pero es algo que va a desaparecer», lamenta Ana, pese a que ella mantiene viva la ilusión por un negocio que le gusta.