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Seis meses después de que una cuarentena de vecinos de las calles Hórreo, Molino, Los Diezmos, Los Hornos e Infanta Urraca de Alberite presentaran un escrito en el Ayuntamiento solicitando «medidas urgentes» para solucionar problemas como la «suciedad, dejadez por parte de los propietarios ... de los edificios, peligrosidad e insalubridad», estos no solo no han remitido sino que se han incrementado. Un coche lleva abandonado años en el camino del Molino y ya tiene todas las lunas rotas, se ha vertido aceite de motor en varios puntos, aceras y plazas como Infanta Urraca se han hundido y la casa en ruina siguen suponiendo un peligro.
José Luis González, vecino del camino del Molino, se queja de un solar sin mantenimiento frente a su casa, lleno de maleza. «Esto lleva años así. Vino el banco, lo valló y así se quedó. En cuanto se seque, como se prenda fuego, ahí hay un transformador de electricidad... Dios sabe lo que puede pasar», expone José Luis, quien reclama al Consistorio que lo limpie de forma subsidiaria.
Manuel Ibáñez, igualmente vecino del camino del Molino, señala las manchas de aceite sobre la vía pública. «Vino un coche, dejó ahí todo el aceite y, aunque llamamos a la Guardia Civil y el propietario se llevó el vehículo, dejó ahí la mancha. Pregunté a los agentes y me dijeron que es cosa del Ayuntamiento la limpieza, así que lo transmití al alcalde y su contestación fue: «Si no os gusta el pueblo, os vais a vivir a Villamediana», asegura Ibáñez, quien considera que es un problema de insalubridad y abandono de vehículos.
Solar abandonado «Como se prenda fuego, ahí hay un transformador de electricidad... Dios sabe lo que puede pasar»
Suciedad en la vía «Vino un coche, dejó ahí todo el aceite y, aunque el propietario se lo llevó, dejó ahí la mancha»
Casa en ruinas «Hay ratas, palomas, gatos... Cualquier día se derrumba, es un peligro»
Perros peligrosos «Un día me arrinconaron. Cualquier día pierden el control y ahí nos quedamos»
Estrella Polo, vecina de la calle Hórreo, critica el estado de un coche, años atrás en perfecto estado y ahora completamente destrozado. Al parecer, quedó allí tras volcar en una nevada en una vía superior y ya no se movió de allí. «Tiene todos los cristales rotos y si los niños se agarran se pueden cortar. Yo se lo dije al alcalde y me contestó que si nos molestaba...», exclama Estrella. «Yo tengo dos nietos de 3 y 6 años y cómo voy a dejar que jueguen por aquí», añade otro vecino de la zona.
Rita, vecina de la calle Hórreo, fue quien reunió las firmas hace meses y siente que la reclamación formal realizada al Ayuntamiento no sirvió para nada. «Sigue todo igual o, incluso, peor, porque antes no había manchas de aceite y el coche está más destrozado aún», opina Rita. «Y según me han dicho, el alcalde ha dicho que no sabe nada del escrito con las firmas que entregamos», añade Rita. Diario LA RIOJA ha intentado obtener una explicación del alcalde de Alberite, Sergio Tudelilla, sobre este asunto y no ha habido respuesta. Cabe destacar que en la lista electoral del PP para las próximas elecciones en Alberite solo un candidato repite de los catorce que la forman. Se trata de Jacinto Gómez de Segura, número 9 en 2019 y ahora el 2.
Para colmo de males, en la noche del martes al miércoles se produjo un robo en el vehículo de una vecina estacionado en la calle. José Antonio Vázquez, vecino de Los Diezmos, asegura sufrir filtraciones. «Como mi casa está más baja que la calle, me entra agua. Y la plaza Infanta Urraca se está hundiendo. Ya nos hemos quejado. Siempre me dicen que van a venir a arreglarlo y así llevo más de diez años», asegura José Antonio. Vanesa Pinillos, vecina del Hórreo, vive junto a una casa en ruina, con el consiguiente peligro. «Hay ratas, palomas, gatos... Se me meten mosquitos en casa y huele horrible. Cualquier día se derrumba, es un peligro», alerta Vanesa, preocupada, sobre todo, porque es madre de dos hijas de 2 y 6 años.
Y Marga Santo Domingo, vecina de la calle Los Hornos, critica que un vecino pasea a sus perros potencialmente peligrosos sueltos y sin bozal, como ha podido comprobar este miércoles este periódico. «Me he quejado en Guardia Civil y Ayuntamiento y todo sigue igual. Un día los perros me arrinconaron. Cualquier día no los controla y ahí nos quedamos», lamenta con preocupación Marga.
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