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El templo Tresfuentes cumple 800 añosEl templo de Nuestra Señora de Tres Fuentes de Valgañón cumple ocho siglos. Durante este tiempo su vida ha sido muy intensa, ya que por él han pasado hidalgos, templarios, reyes e incluso la banda terrorista ETA lo eligió en 2008 para construir un zulo para el secuestro del entonces juez Fernando Grande-Marlaska y almacenar armas.
Su historia comenzó el 7 de noviembre de 1224, como refleja una inscripción grabada en la fachada. Ese día don Mauricio, obispo de Burgos, consagró la iglesia románica de Tresfuentes, denominada así por la fuente de tres caños aledaña. Y es que cuenta la leyenda que la Virgen se apareció a una pastorcilla (Inés) para tratar de mejorar la conducta descarriada de los habitantes de Valgañón y, al parecer, surtió efecto. Tras el milagro –como relata Joaquín Borriño, el guía de la iglesia, alimentado por la recopilación histórica de J. Luis Agustín Tello–, el obispo, influido por Fernando III de Castilla, decidió levantar el templo.
Ubicada en un idílico entorno, ha sufrido varias intervenciones, la principal en el siglo XVII, y restauraciones, como entre 1994 y 2009, cuando se actuó en el ábside románico y se derribaron las sacristías de una etapa intermedia.
En su interior, todo brilla con luz propia. Ya la puerta de doble hoja de acceso al templo es una joya del siglo XVII, construida en madera con herrajes, probablemente por artesanos de Ezcaray. En su interior, el suelo está formado por sepulturas numeradas. Por 1.000 maravedíes, equivalente a 30 reales, enterraron allí a todo el que quiso, hasta el siglo XVII.
Allí está la imagen de San Antonio de Padua (patrón de Valgañón), «al que visitaban las chicas para echarse novio», contaba Borriño. «Venían hasta trenes de Haro con chicas, daban vueltas alrededor de la iglesia, tenían que beber del caño de en medio sin apoyar las manos y luego pisaban la sepultura 13, la de San Antonio».
En su interior también se alojan diferentes retablos, como el del Cristo de la Vera Cruz, también denominado Cristo de Bañares. Y es porque una de las versiones históricas cuenta que los bueyes que transportaban el Cristo desde Burgos hasta Bañares no quisieron seguir su camino al pasar por este paraje. Ante la imposibilidad de avanzar, decidieron dejarlo en la iglesia de Tresfuentes, al interpretarlo como una decisión divina. Y cada 28 de abril, los vecinos de Bañares se acercan en romería hasta esta iglesia para visitarlo.
Con motivo de su octavo centenario, la iglesia acogerá actividades los viernes y sábados de julio y agosto, la primera de ellas mañana viernes. Será una conferencia a cargo del sacerdote Pablo Díaz Bodegas. Además, durante julio y agosto el templo permanecerá abierto para visitas guiadas, de 10.00 a 14.00 horas. Se puede concertar cita en el 626 401 884.
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