Los participantes cigüeñeros disfrutan de una de sus dos sesiones semanales de gimnasia. E. G. M.

Uruñuela

Un taller para ser siempre jóvenes

La Mancomunidad del Najerilla ofrece actividades para mayores en seis pueblos, lo que fomenta el envejecimiento activo

Viernes, 10 de mayo 2024, 08:47

Cuando todas las personas llegan a una cierta edad, las piernas comienzan a pesar, asoman los achaques y la memoria no funciona tan rápido como en los días de esplendorosa juventud. Eso es inevitable. Pero hay maneras y maneras de hacerse mayor. En Uruñuela, ... por ejemplo, un grupo de vecinos se esmera todas las semanas por mantener la máquina correctamente engrasada.

Publicidad

Son ocho mujeres y un hombre, que los martes y jueves acuden hora y media al centro cultural de la localidad a ejercitar cuerpo, mente y, de paso, disfrutar de un buen rato en compañía. Mila, Angelines, Carmen, Flori, Elisa, Teresa, María Luisa, Julia y Pedro no fallan al compromiso con Nayer, su monitor, con el que están encantados. «Hoy estamos haciendo operaciones de cálculo, de interpretación y de lenguaje; luego toca un rato de gimnasia», cuentan entre todos.

«Es el tercer año que venimos y, la verdad, que continuamos con la ilusión de los niños, como si fuese el primer día», aseguran. Sin embargo, un problema se vislumbra en el horizonte. El próximo 30 de mayo finalizarán las clases. Porque estas dependen de una subvención autonómica, que previsiblemente no se volverá a conceder hasta octubre. «Es una pena, aunque trataremos de seguir viéndonos en el bar o en la piscina», apuntan los participantes que, más que compañeros, ya se ven como amigos.

«Llevamos tres años en el taller y seguimos con la ilusión de los niños, como si fuese el primer día», apostillan entre todos

Al igual que en Uruñuela, este taller de promoción de la autonomía personal y envejecimiento activo se imparte en otros municipios de la comarca. De momento, estos son Tricio, Arenzana de Abajo, Cárdenas, Berceo y Villar de Torre. En total, suman a decenas de personas de una provecta edad, que ya perciben esta clase de talleres como una necesidad vital.

«Si pudiera, vendría toda la semana», dice la cigüeñera Elisa. «Disfruto la compañía y me ayuda a recordar cosas», replica Pedro. «Como de pequeña no fui apenas a la escuela, aquí he aprendido mucho sobre matemáticas», comenta Julia. Son solo tres ejemplos de cómo este colectivo se ve beneficiado por actividades destinadas exclusivamente a ellos. Aunque todavía hay muchos a los que estas cosas les dan vergüenza.

Publicidad

«He intentado animar a mi marido para que venga, pero no hay manera», explica una de ellas entre risas. Desde la Mancomunidad del Najerilla, Maite, su responsable, se muestra satisfecha, aunque con cierta pena. «Es una lástima que terminemos el día 30; ojalá que en el futuro el gobierno regional financie estas iniciativas todo el año», sentencia.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta 136 Aniversario!

Publicidad