Metola despide el año con las miras puestas en la «gran oportunidad» del Milenario

El alcalde, Agustín García Metola, se mostró ayer «contento» por cómo ha transcurrido el año 2018 para la ciudad, satisfacción empañada, a nivel personal, por «ciertos puyazos y banderillas que a uno le dejan un poco tocado», dijo en referencia al hecho de que la oposición le dejara sin sueldo y, también, a «apoyos o no apoyos en lo que puede ser la buena marcha del ayuntamiento».

A su juicio, la ciudad está ahora «en el punto de partida para dar un impulso entre todos y recuperar lo que nunca deberíamos haber perdido. Santo Domingo de la Calzada era una referencia como cabecera de comarca en muchos aspectos y tenemos que volver a serlo», manifestó.

Como hitos para este 'despegue' habló del rehabilitado edificio del Corregimiento de Rioja y también de la exposición permanente de relojes y campanas puesta en marcha por la catedral en la torre exenta. Tampoco obvió la importante recuperación del patrimonio que va a suponer la restauración de las fachadas de la catedral y la rehabilitación de la iglesia de San Francisco, y, además, mentó el arreglo del tejado del Avenida y de algunas dependencias del convento de San Francisco, «porque esperamos que sea un núcleo expositivo a lo largo del Milenario».

En este último puso el acento como «gran oportunidad» para revitalizar la ciudad y subrayó que la celebración «no corresponde solo a unos pocos sino que es de todos y el hecho de que salga bien o mal también es de todos, no de unos pocos. Por eso, animo a la gente a participar en todo lo que se organice y a tener iniciativas para que ese año sea bueno y productivo».

El regidor municipal hizo estas declaraciones en un aparte de la tradicional despedida de año que el Ayuntamiento celebró ayer con trabajadores municipales y representantes de las diversas asociaciones, en el que trasladó a todos los calceatenses sus mejores deseos a nivel familiar, personal y profesional.