La ATC hace una invitación a participar como actores en 'Los Milagros del Santo'

La Asociación Teatral Calceatense (ATC) va a empezar próximamente a preparar la edición 26 de Los Milagros del Santo y, para ello, necesita lo más importante: los actores. Ellos han sido el corazón de la representación desde que esta iniciara su andadura hace un cuarto de siglo, por cuanto en ellos reposa el espíritu de la obra al simbolizar la misma voluntariedad, el altruismo y la generosidad que aquel cuya vida relatan cada mes de agosto. Pero, siendo tan importantes, no andan sobrados de ellos, de ahí la invitación lanzada por la presidenta del colectivo teatral, María Torruella, para que este año más gente se anime a formar parte de la gran familia que cada verano hace posible el milagro de llegar a escena.

«Estamos empezando a preparar la vigésimo sexta edición y nos gustaría que la gente se animara a participar. De momento, que lo vayan pensando. En fechas próximas convocaremos una reunión informativa y a ella nos gustaría que acudiera ya toda la gente que esté dispuesta a salir en la obra, para que no lo dejen a última hora», indica Torruella.

La principal responsable de la agrupación teatral asegura que el esfuerzo que supone robar horas al tiempo del verano queda sobradamente recompensado por el disfrute y la satisfacción personal de contribuir a mantener un espectáculo que se ha convertido en uno de los principales referentes culturales del estío calceatense, además de por el buen ambiente que se genera en el seno de la representación. Lo ratifica Tere Dulac, responsable de Comunicación de la obra. «La gente lo pasa muy bien, la prueba es que algunos estamos desde hace 26 años y otros llevan ya muchas ediciones», dice.

Niños hay muchos; mujeres, bastantes. Además de que repitan todos, lo que la obra necesita es actores y actrices jóvenes, y, sobre todo, hombres adultos. El año pasado, de hecho, alguna mujer se ofreció para hacer papeles de hombre, tan bajo fue su número. Todos son necesarios para que se cumpla eso de «el espectáculo debe continuar».