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La vuelta a las aulas en Santo Domingo de la Calzada ha transcurrido sin incidencias. La mayoría de los padres se mostraban tranquilos por la seguridad que les habían transmitido las medidas adoptadas. En los colegios Beato Jerónimo Hermosilla y Sagrado Corazón las entradas han sido muy escalonadas y no se han apreciado aglomeraciones. «Ese era uno de los miedos que teníamos -explicaba una madre de dos niños de 2º y 4º de Primaria del Jerónimo-, pero la verdad es que los padres hemos respetado las indicaciones y nadie se quedaba a hablar en la puerta».
Otra madre, en este caso de un alumno de infantil que esperaba en la salida del colegio, manifestaba rotunda «Donde mejor y más seguros están es aquí, en el colegio».
Jerónimo Hermosilla ha comenzado el curso con una reivindicación, y es que, al estar dividido en dos edificios, uno de ellos no cuenta con conserje, por lo que están obligados a cerrar el colegio desde la entrada hasta la salida, lo que ocasiona bastantes inconvenientes, como que si un niño precisa ir al médico, no puede asistir a clase ese día, además de que no hay atención a consultas o imprevistos que pudiesen surgir. «Queremos igualdad de condiciones en los dos centros», solicitaban.
En el colegio Sagrados Corazones se han habilitado las tres puertas y, a pesar de su cercanía al Jerónimo Hermosilla, se ha conseguido una jornada prácticamente sin aglomeraciones.
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