![Las ferias soplan 750 velas sin poder celebrarlo](https://s3.ppllstatics.com/larioja/www/multimedia/202011/29/media/cortadas/ferias-kKyG--1968x1216@La%20Rioja.jpg)
![Las ferias soplan 750 velas sin poder celebrarlo](https://s3.ppllstatics.com/larioja/www/multimedia/202011/29/media/cortadas/ferias-kKyG--1968x1216@La%20Rioja.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El COVID-19 lo trastoca todo. También los aniversarios, como el bien redondo que pudiera haber celebrado Santo Domingo de la Calzada este año con respecto a sus ferias de la Concepción: 750 años. Es el tiempo transcurrido desde que la ciudad calceatense enmarcó su primera feria anual, una vez que el rey Alfonso X 'el Sabio' concedió su celebración un lejano 19 de marzo del año 1270.
La pandemia escribe otro hito, unas líneas más, en la historia de este evento, al suspender la edición de este año, por vez primera en las últimas tres décadas. El aniversario hubiera sido otra buena oportunidad para subrayar el programa, pero queda reducido al recuerdo de la efemérides.
«Se trató de un hecho de gran relevancia, toda vez que este tipo de concesiones reales eran en ese momento extraordinarias y especialmente beneficiosas», explica el doctor en Historia, Francisco Javier Díez Morrás, que ilustra lo anterior indicando que en el entorno geográfico más próximo únicamente Belorado tenía ese privilegio, pues disfrutaba de una feria desde 1116, Haro lo conseguiría en 1295 y Burgos en 1339.
El contexto de la concesión se enmarca en la pujante importancia de la entonces villa; una consecuencia de su aumento de población y de su creciente relevancia política y eclesiástica. «En 1232 había sido confirmada la traslación de la sede episcopal y en 1250 alcanzó un nuevo estatus jurisdiccional al pasar de villa abadenga a realenga, es decir, había quedado bajo el dominio directo del rey», explica Díez Morrás.
Cuenta el historiador que, según el documento de concesión que se conserva en el archivo municipal, la feria calceatense debía comenzar el día de San Miguel, es decir, el 29 de septiembre, prolongándose durante quince días más. «Ocho días antes del comienzo podían ir llegando los productos y ganaderías, dándose también otros ocho una vez terminada para poder recoger y retornar a los lugares de origen», explica de aquel mercado, que se celebraba en el espacio que hoy ocupa la plaza de España o Mayor, y del que dice que tras quedar protegida por la muralla, a partir del siglo XIV, pasó a conocerse precisamente como plaza del Mercado.
No se sabe cuándo, pero en algún momento la feria pasó a celebrarse el día de San Andrés (30 de noviembre) y siguientes. Díez Morrás explica que, «sin embargo, parece que a finales del siglo XVI dicha fecha no se respetaba de manera estricta, comenzando unos años unos días antes, y otros años unos días después. Esto provocaba desconcierto entre los que deseaban acudir a la feria, al no saber con exactitud y antelación suficiente las fechas. Así, el 9 de diciembre de 1603 el ayuntamiento acordó que a partir de entonces la feria comenzase siempre el día de la Concepción, el 8 de diciembre».
Desde entonces la feria anual de la ciudad quedó fijada definitivamente en torno a ese día en el calendario calceatense, no habiendo sufrido otras variaciones que las propias de la evolución económica e histórica experimentada por la sociedad.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Iker Elduayen y Amaia Oficialdegui
Jon Garay y Gonzalo de las Heras
Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.