La magia de los belenes de Santo Domingo

La obra, por su monumentalidad y la infinidad de detalles, se convirtió en un atractivo importante más de la catedral. Muchas personas de dentro y fuera de la región se acercaban a verlo, incluso asociaciones belenísticas. En el año 2012, el propietario de la obra, Miguel Ángel Lorente, una suerte de 'mecenas' del templo, con el que ha colaborado en otras ocasiones, decidió donarlo a la catedral, pasando a exhibirse en el claustro.

En la estela de su atractivo empezaron a surgir a su vera más belenes, en buena parte gracias al entusiasmo del sacerdote, Carlos Pérez-Caballero. Así, en el año 2014 llegaron los playmobil, populares figuras de juego de los años 80-90, con los que la asociación Aesclick comenzó a montar gigantescos belenes hechos con miles de piezas, que se convirtieron en otro importante reclamo para los niños y, casi más, para los nostálgicos adultos que les acompañaban.

Estas y otras muchas creaciones fueron el germen de la exposición actual de belenes que puede verse, hasta el 9 de enero, en la ciudad calceatense, este año repartidos entre la catedral y la iglesia de San Francisco.

En esta última, entre otros, puede contemplarse el hermano pequeño que le ha salido al belén napolitano de la catedral, realizado también por Nicola Maciarello, que lo ha donado a la ciudad. Es para pasar un rato viéndolo detenidamente, igual que el espectacular belén de Playmobil que, superando los registros de ediciones anteriores, ha montado la asociación Aesclick. Ocupa unos 130 metros cuadrados y reúne más de 4.000 piezas y figuras que resumen la historia del Antiguo y Nuevo Testamento.

Comparte espacio, en el mismo templo franciscano, con una veintena de dioramas alojados en el coro, donde permanecerán todo el año, cuya autora es la calceatense Olga García Chinchetru, que ha realizado una gran labor. La oferta se completa con una colección de belenes de Lladró, cedidos por José Manuel Villarán, y con otros ejemplares aportados por particulares a la exposición.

En la catedral, por su parte, puede verse, además del belén napolitano, un belén de Cartapesta, como se denomina en Italia a la técnica que utiliza trozos de papel periódico cortados a mano unidos mediante un pegamento para formar objetos para crear figuras o composiciones artísticas. Su autor es, también, Nicola Maciarello. Igualmente puede verse un belén mecánico, con más de 100 piezas en movimiento, que ha sido diseñado y decorado por el artista portugués José Gonçalves y su mujer Rosa.

Además, hay un belén de figuras de Almansa (tradicional empresa murciana), con escenas que abarcan desde la Anunciación hasta la venida de los Reyes Magos, y otro belén de estilo Salzillo. La exposición se nutre además, entre otros, con un nacimiento montado dentro de una cuba de vino; uno más que representa un frontón dentro de una pelota, u otro dentro de una escultura que asemeja a una vela, por citar algunos.

Santo Domingo de la Calzada vuelve a ser, un año más, una referencia belenística.