Cuzco trae color a Santo Domingo

Los cuadros son ejemplos de la cultura mestiza que alumbró la llegada de los españoles; una occidentalización de la cultura andina que propició una fusión de las técnicas precolombinas con las del pueblo conquistador. Visualmente se representa en las obras, aparte de en la utilización de los tonos ocres, en la integración de elementos iconográficos católicos occidentales junto a motivos del imaginario indígena.

De ahí que el sacerdote Carlos Pérez-Caballero incidiera en el componente cultural de las obras, más allá de su representación religiosa. «Cuando uno va a tierra extraña se lleva sus devociones. Los frailes llevaban sus vírgenes y los cuzqueños las pintaban después a su estilo, por eso, no podemos hablar solo de arte religioso sino de arte humano y etnográfico», indicó durante la presentación de la muestra.

En esta también intervino, en representación del Ayuntamiento, el concejal Javier Ruiz, que puso el acento en la dinamicidad de la catedral por el espíritu emprendedor y en la iniciativa del párroco de la catedral, como también hiciera después el director provincial de Ibercaja en La Rioja, José Luis Ollero. La entidad es una de las partes que intervienen en el proyecto 'Aula cultural Camino de Santiago', que ha dado ya a la luz diversas conferencias y puesto en marcha una escuela de teatro. El acto, participado por algunas decenas de calceatenses, también contó con la presencia del delegado diocesano de Patrimonio, Pablo Díaz. «Santo Domingo es siempre como la 'tacita de plata'», dijo.

El párroco, Francisco José Suárez, puso el acento, además de en los cuadros -principalmente de vírgenes-, en los marcos de los mismos, también realizados a mano. Toda la colección ha sido donada a la catedral por su anónimo propietario.