«El cargo me ha venido caído del cielo. Nunca me he dedicado a la política»

– ¿Pensó alguna vez en ser alcalde de un pueblo que, además, no es el suyo?

– Jamás. Me ha venido el cargo caído del cielo. Nunca me he dedicado a la política y es algo desconocido para mí. Ha sido por amistad con José Ignacio Ceniceros, porque somos del mismo pueblo (Villoslada) y sabe que mi esposa es de San Vicente de Robres (aldea de Robres del Castillo). Y como había una situación insostenible, sin pagar nóminas ni obras, e iba a ser cosa de seis meses, adelante.

– ¿Nunca había formado parte siquiera de una lista electoral o se ha afiliado a algún partido?

– Nada de nada. Actividad política, cero. He tenido que aprender el oficio.

– Mucha confianza debía de tener en usted el PP, ¿no?

– Ceniceros confiaba en mí porque nos conocemos de toda la vida y cierta preparación tengo por mi trabajo para poder sacar al Ayuntamiento de la situación anómala en la que estaba, sin alcalde. Llevamos un mes y hemos hecho muchas cosas, sobre todo pagos pendientes. Ya ha habido un pleno y se ha iniciado una obra. Poco más podemos hacer.

– ¿Y piensa presentarse a las elecciones?

– No. Me lo ha pedido ya gente de Robres y San Vicente pero no puedo por mi trabajo. Un Ayuntamiento requiere tiempo y yo no lo tengo. Subo los fines de semana, más que nada, por ver la obra iniciada en la iglesia, y después subiré un martes porque se va a iniciar el cambio de trazado en la carretera de San Vicente y tengo que dejar mi trabajo. Así que no puedo. Si estuviera jubilado a lo mejor lo pensaría porque al pueblo lo quiero y lo disfruto, es maravilloso.

– ¿Qué sucedió para que dimitiera la Corporación en bloque?

– Chocaron varias personas por una obra que se iba a empezar y, en lugar de dialogar, no se pusieron de acuerdo y surgió un mal rollo que se fue a la deriva y no se solucionó. Yo soy neutral, pienso que eso hay que aparcarlo, que cicatricen las heridas y poco a poco se olvide porque el pueblo rezumaba tranquilidad, un buen ambiente que se ha ido al traste pero que espero que se pase.

– ¿Ha afectado ese conflicto a la convivencia en el pueblo?

– La gente lo va olvidando. Lo mejor es que hay bastante juventud y a ellos no ha llegado, siguen unidos. Los mayores espero que se arreglen.

– ¿Qué objetivos tienen como equipo de Gobierno?

– Continuar y acabar con lo proyectado. Y solucionar los problemas que surjan, como una avería que hubo en el depósito de agua por la que estuvimos varios días sin agua. Cosas que pasan en todos los pueblos y que el alcalde tiene que capear.

– De contar con tres concejales, el PP ha pasado a dos, incorporándose una edil del PSOE. ¿Qué tal es el trabajo en la nueva Corporación municipal?

– Muy bueno, tengo unos compañeros buenísimos, tanto José Luis como Esther, dispuestos a ayudar en lo que sea. Hay que agradecer a la gente que desde el primer momento se ha prestado a ayudar porque es maravillosa. Y también quiero agradecer al anterior alcalde, que siempre me ha ayudado cuando se lo he pedido.

– Robres ha pasado de ser una balsa de aceite a ser el primer municipio de La Rioja regido por una gestora. ¿Les apena?

– Sí, es una pena que tomaran la decisión de dimitir, pero qué le vamos a hacer, lo hecho, hecho está. Yo no habría tomado esa decisión pero la respeto y comprendo.