Presentadas las dos primeras solicitudes para la extracción del lobo en La Rioja

El protocolo marca, por ejemplo, que si se producen dos ataques o cinco animales muertos o heridos en una semana, se consideran daños graves y se pasa de la primera a la segunda fase, por la que, tomadas las adecuadas medidas preventivas, se evalúa la extracción del lobo «en función de la última estima poblacional disponible, de las tasas de fertilidad, supervivencia y del área de distribución efectiva de la especie». UPA expone que uno de los ganaderos afectados ha tomado las medidas que se piden, como contar con seis mastines para un rebaño de 600 ovejas, presencia estable del pastor y de personal durante al menos 8 horas diarias, control mediante GPS y utilización de estructuras para pernoctar, además de otras secundarias como los dispositivos visuales y sonoros, así como la vigilancia nocturna.

«Tras la implantación de estas medidas se sufrió otro ataque con una oveja muerta el 1 de mayo», expone UPA, que subraya que, al incorporarse al sector en diciembre de 2022, el prorrateo desde el porcentaje anual al de menos de cinco meses supondría un 4,6%, frente al 5,6 que se exige. El consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado, confirma la recepción de las solicitudes y anuncia que ya se ha solicitado un informe de daños a la Dirección General de Ganadería para estudiar los casos.