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Organizadores y participantes en el mercado 'Huella 0' muestran los objetivos del desarrollo sostenible. Diego Marín A.
Nalda deja su huella verde

Nalda deja su huella verde

Un nuevo mercado de El Colletero promueve 'La segunda vida de las cosas'

Diego Marín A.

Logroño

Lunes, 27 de febrero 2023, 01:00

Nalda fue ayer el municipio en el que todos los políticos quisieron estar, aunque por diferentes motivos. Por una parte, el Ayuntamiento organizó unas Jornadas Divulgativas del Conjunto Rupestre 'Los Palomares' y una veintena de personas, entre ellas el alcalde, Daniel Osés, y el candidato del PP a gobernar la comunidad, Gonzalo Capellán, asistieron a la visita de las cuevas con las explicaciones de los arqueólogos Pedro Álvarez Clavijo y Javier Garrido Moreno.

Por otro lado, la asociación El Colletero, en colaboración con el Consistorio y Fundación Caja Rioja y CaixaBank, celebraron la primera edición del mercado 'Huella 0. La segunda vida de las cosas' en el polideportivo. Y no se lo quisieron perder ni el director general de Biodiversidad, José Luis Rubio, ni el consejero de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía, Álex Dorado (PSOE). En colaboración con Moda Sostenible, el CRA Moncalvillo de Nalda, la asociación Panal, REAS Rioja y los artistas de Espacio Común se dio forma a un mercado de objetos de segunda mano en el que hubo ropa, libros, discos, películas y objetos de coleccionista, además de presentar el proyecto de micorrizas y visitar el huerto escolar.

«La huella 0 es muy difícil porque hay que ver todos los productos y actividades y cogemos el coche todos los días, pero todo lo que se haga es muy importante. Nosotras trabajamos los objetivos de desarrollo sostenible, estamos comprometidas y en muchos ámbitos los superamos porque tenemos mucho compromiso con el entorno», advirtió Raquel Ramírez, portavoz de El Colletero. La asociación de Nalda trabaja las huertas del Iregua con producción agroecológica, venta directa y consumo responsable y colabora con un proyecto de investigación de tierra micorrizada, habiendo plantado azafrán y girasoles en el huerto escolar.

«Aquí lo que se vende es mínimo y lo que se vende, en dinero, no da mucho, pero sí proporciona mucho al medio ambiente. Si compras unos vaqueros, provoca que no se hagan unos nuevos. En eso se basa la huella 0, que le demos el máximo de uso a lo que tenemos», insta Ramírez.

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