La Venancia sale de fiesta en Nájera

Por fin¡ dirán la mayoría de los najerinos cuando esta noche la cuba Venancia parta de la sede de la peña Malpica para dirigirse en pasacalles alegre y musical hasta la explanada de la calle Canalón, donde como cada noche de San Juan arde la hoguera en la que se queman los malos recuerdos, para dar paso a los mejores deseos y propósitos para la siguiente anualidad.

Algunos dirán que la exclamación es la de siempre porque nadie duda de que estas son las fiestas más esperadas y deseadas del año, ya que en ellas tienen lugar las vueltas, tanto el día de San Juan como el de San Pedro, y lo de las vueltas para los najerinos y muchos comarcanos, es algo muy especial.

Por eso en esta ocasión el ¡por fin! tendrá un eco especial, ya que debido a la pandemia y las correspondientes normas sanitarias que hubo que tomar, ya se cumple el tercer año desde que se pudieron celebrar las últimas vueltas. Por cierto que, como ha venido ocurriendo en las últimas fechas, aquellas se celebraron en medio de unas altas temperaturas que llevaron a organizar un servicio de riego a chorro en la plaza de España para las últimas vueltas del día de San Pedro.

Pero volviendo a la jornada de hoy, tal vez sea la apertura de estas fiestas najerinas que dan paso al verano, la más trasnochadora que se conoce, al menos en tierras riojanas. Porque hasta las 22.30 horas no llegará el momento citado en que la Venancia, a hombros de los peñistas de la blusa negra, y acompañada de una amplia comitiva musical, se dirija hasta el lugar donde arde la hoguera y, tras un ratito en el lugar, emprenda el viaje de regreso a la sede peñista, mientras el personal se dispersa por la ciudad para impregnarse de fiesta.

Unos se servirán de la noche para descansar y así poderse emplear a fondo en las vueltas de la mañana de San Juan. Otros la utilizarán como 'trampolín' para llegar a ellas 'engrasados'. Pero lo que sí que es seguro es que todos se juntarán horas antes de la fijada para comenzar a bailar en torno al quiosco del Paseo San Julián, para dar cuenta de los copiosos almuerzos que sirven para llenar de energía los cuerpos, algo muy necesario, no en vano desde el arranque de las vueltas hasta su final suelen transcurrir cerca de cinco horas. Como de costumbre, los almuerzos se consumirán en grupos familiares o de amistad, y en ellos no han de faltar viandas tan típicas como las chuletillas, el chorizo, la morcilla, la careta o el tocino, todo al sarmiento.

Por cierto, teniendo en cuenta la infinidad de fuegos que se han de prender, desde el Consistorio se llama la atención para que todo el mundo tenga el máximo cuidado, los incendios están al acecho.

Se espera una masiva asistencia de gente a esta vuelta de las vueltas, valga la redundancia, máxime teniendo en cuenta que es antesala del fin de semana.

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