Las trabajadoras reclaman a Aralia un trato más humano en la residencia de mayores de Nájera

Encabezada por sendas pancartas portadas por las empleadas del centro y en las que se podía leer: 'Somos personas y trabajamos con personas' y 'Somos personas y trabajamos con ellas', la manifestación partió desde las proximidades de la entrada a la residencia, para continuar por diversas calles hasta desembocar en la plaza de España, delante del Ayuntamiento.

Durante el recorrido y la parada, se entonaron consignas como 'Más personal, más humanidad' o 'Aralia no cuida ni a sus trabajadores, ni a sus mayores'. La marcha continuó cruzando el río Najerilla por la pasarela peatonal hasta llegar al mercadillo, y desde allí por la calle Avenida de La Rioja hasta volver a la residencia.

La portavoz del comité de empresa, Amparo Nalda, señalaba que «estamos funcionando bajo mínimos, mínimos, de la plantilla, ya que de las 31 personas que estamos ahora hay 13 de baja o de vacaciones y la empresa no las sustituye, con lo que no podemos atender a los abuelos como nosotras hemos venido haciendo desde que se puso en marcha la residencia y algunas, como yo, llevamos los catorce años que tiene trabajando aquí».

Según aseguraba, la justificación de la mercantil Aralia cuando se le plantea que eso no puede ser así y que hay que cubrir esas bajas o vacaciones es «política de empresa, que la empresa no les deja», algo que según añadía viene ocurriendo «por lo menso durante todo lo que llevamos de año».

No obstante, Nalda puntualizaba que a los residentes «se les hace todo, pero sin las debidas condiciones. Se les asea, se les ducha, se les da de comer, pero no nos entretenemos con ellos el tiempo que deberíamos, es decir, no podemos hacer las cosas con la debida pausa para una mejor atención a los abuelos».