El pleno del Ayuntamiento de Nájera aprueba reabrir Aquanájera hasta el año 2028

Finalmente, tras más de un año en el limbo, el Ayuntamiento de Nájera ha dado luz verde a la reapertura del complejo Aquanájera, que incluye piscinas climatizadas y gimnasio. La decisiva votación se produjo este miércoles en un pleno extraordinario, que salió adelante con ocho síes (Partido Popular y Partido Riojano), tres abstenciones (PSOE) y dos noes (Izquierda Unida). Ahora, habrá que esperar varias semanas más hasta que se ponga a punto el edificio y empiece a funcionar.

La empresa que se encargará de prestar el servicio será la logroñesa JIG Easy Services, que fue la única que se presentó al concurso. Su oferta, ya aceptada, es de 728.793,45 euros (con IVA) para los dos próximos años. Después, existirán dos cláusulas de renovación anuales hasta 2028, al mismo precio. Por tanto, el coste de reabrir Aquanájera se quedará en un montante aproximado de 1.450.000 euros para los siguientes cuatro años.

Sin embargo, esa cifra tiene truco, pues el Ayuntamiento de Nájera tendrá que hacerse cargo de las facturas de gas y electricidad del recinto, que dispararán el precio varios centenares de miles de euros más. Con esos mimbres, el contrato de servicio de Aquanájera será el segundo más costoso para la ciudad, después del de la limpieza viaria de FCC.

Paradójicamente, a pesar de que este nuevo contrato es más caro que el anterior, habrá una reducción del servicio. Esto se debe a que los costes laborales, en particular el salario mínimo, ha aumentado significativamente respecto a 2019, cuando se firmó el anterior pliego. En concreto, Aquanájera abrirá 55 horas semanales, frente a las 88 que abría hasta octubre de 2023.

Estas 55 horas se distribuirán de lunes a viernes de 08.00 a 13.00 y de 16.00 a 21.00 horas (en jornada partida), los sábados solo en horario de mañana, de 09.00 a 14.00 horas, y permanecerá cerrado los domingos. Asimismo, durante los meses de verano únicamente abrirá el gimnasio, de lunes a viernes, entre las 07.00 y las 14.00 horas. El bar del recinto queda excluido del contrato y seguirá clausurado. Con esta realidad delante, el equipo de gobierno del Partido Popular confirma que realizará un estudio «para tratar de adaptar las tarifas de los usuarios a menos horas de apertura».

Precisamente, este aumento de precio con recorte de servicio es uno de los temas que más preocupa a los partidos de la oposición. Durante el pleno de este miércoles, todos ellos expresaron dudas respecto a la conveniencia del contrato. La portavoz de Izquierda Unida, Idoia Eguileor, fue la más clara en su discurso. En él, afirmó que «aunque el nuevo pliego sea legal, podría resultar muy perjudicial a largo plazo para las arcas públicas». Eguileor también destacó que este tipo de gestión privada «no es adecuado, ni rentable» y apostó por municipalizar el servicio.

Por su parte, el PSOE quiso remarcar el detalle de que, fruto de la anterior gestión, la empresa JIG acabó denunciando en los tribunales al Ayuntamiento, reclamándole unos 150.000 euros por el aumento de costes energéticos. Actualmente, el litigio se encuentra parado para evitar más asperezas. Otro asunto que preocupa a la Corporación es la falta de mantenimiento. Las máquinas depuradoras y demás elementos llevan sin revisarse desde el mes de enero.

Por tanto, si están averiadas, la reapertura podría demorarse y ser más cara. Algo que quiso destacar el Partido Riojano, a pesar de votar sí. Previsiblemente, el edificio también necesitará arreglos en el techo. La imprevisibilidad del estado de las instalaciones es, a día de hoy, toda una incógnita por resolver. Como últimos detalles, Aquanájera contaba hasta octubre de 2023 con unos mil socios. Habrá que ver cuántos de ellos vuelven, pues es sabido que muchos se han afiliado a otros gimnasios y piscinas. Con el fin de repescarlos, el servicio incluirá, además del uso de las instalaciones, cursos deportivos y otras actividades como zumba, aquagym o pilates.