Nájera, otro autobús que deja en tierra a los estudiantes

Esta situación ha suscitado quejas entre los usuarios de esta línea de autobús interurbano. «Mi madre fue a quejarse porque alguna vez me he quedado sin plaza y le dijeron que después de San Mateo se intentaría solucionar, pero aquí no se ha solucionado nada», cuenta una estudiantes que ayer por la mañana hacía fila desde las 7.00 horas.

En caso de quedarse sin asiento, la alternativa es coger el siguiente autobús, que llega a Nájera a las 7.30 horas, pero «ya de por sí llego siempre tarde a clase, porque entro a las 7.50, así que cuando me ha tocado coger el siguiente bus directamente no llego a primera hora», explica. Y no es la única con este problema. A su lado, un compañero coincidía con ella en que en caso de no entrar en ese primer bus tampoco llega a tiempo, «porque entro a clase a las 8.00 horas». Además, apuntan que, al llenarse casi siempre el vehículo en la primera parada, «en la de arriba hay muchos días que ni para, solamente para decir que va lleno», y esto es algo que obliga a las personas que viven en los barrios altos a tener que bajar a la estación.

Por eso, los pasajeros, entre los que también hay algún trabajador que va a Logroño, cada vez llegan antes para hacer fila. «Llevo aquí desde las siete menos veinte», relataba una estudiante najerina que acude a un instituto de la capital y que logró ser de las primeras en la fila para montarse en el autobús. Otros, aunque llegaron diez minutos antes de la hora de salida prevista, no tuvieron tanta suerte. «No es la primera vez de esta semana que me quedo sin sitio, antes no me pasaba tanto, pero ahora la gente viene cada vez más pronto. Va a llegar un momento que va a haber que estar aquí a las cinco», lamentaba uno de los cinco pasajeros que se quedaron sin plaza. Algunos de ellos fueron afortunados y lograron bajar a Logroño en el coche de un buen samaritano que paró en la estación y preguntó si alguien necesitaba ir.

Nájera no es la única ciudad donde ocurre una situación similar. San Asensio, Arnedo, Haro o Calahorra son otros ejemplos de casos en los que padres o estudiantes han mostrado su malestar con el transporte a la capital debido a que los alumnos no llegan a tiempo a clase con el primer servicio de autobús. De hecho, en Calahorra una de las madres de un estudiante indicó que a fecha de ayer jueves el problema aún «no se ha resuelto».

Desde el Gobierno de La Rioja afirman ser conocedores de estas situaciones, y en el caso concreto de Nájera, explican que «en estos momentos es prácticamente imposible cambiar el contrato que se tiene con la concesionaria, no se pueden modificar líneas porque hay un contrato en vigor». Sin embargo, afirman que «en futuros pliegos de contratación se estudiará la posibilidad de incrementar frecuencias». Por el momento, los estudiantes que no entren en el bus de las 7.15 tendrán que seguir esperando al autocar de las 7.30 horas.