Nájera, escaparate del Rioja

Con los catorce stands de otras tantas bodegas dispuestos alrededor de la plaza, el personal fue adquiriendo la copa de Rioja, oportunamente grabada con el lema del evento, el portacopas, los vales canjeables por las consumiciones vinícolas y por el generoso bocadillo de jamón con pimiento verde frito, y el cartón del bingo que se celebró al término del evento. Todo ello por seis euros.

Poco a poco la plaza junto al monasterio de Santa María la Real, el monumento más significativo de la ciudad y uno de los más notables del patrimonio cultural y turístico regional, se fue llenando de un público deseoso de probar los caldos de las bodegas presentes: Cuna de Reyes, Viña Berneda, Bargondía, Real de Nájera, Valentín Pascual, Libalis, Abeica, César del Río, Bodegas Najerilla, Ruconia, Florentino Martínez, López de Haro y Santos Sodupe .

En su mayor parte ofrecían la posibilidad de catar vinos blancos, tintos y rosados, aunque algunas de ellas solamente ofertaban un tipo de caldo. De cualquier manera, a lo largo de las más de dos horas que duró el 'Escaparate del Rioja', la plaza fue un ir y venir constante de grupos familiares y de amigos, algunos de ellos llegados desde los pueblos de la comarca y hasta de otras comunidades autónomas.

Además de los bocadillos de jamón ofrecidos por los organizadores, la mayor parte de los puestos de las bodegas también ofrecían a los participantes la posibilidad de acompañar a las copas de vino con aperitivos diversos, desde las socorridas patatas fritas al pincho de chorizo escaldado. Para cerrar el evento, tuvo lugar el acostumbrado bingo que, como premio para el afortunado ganador, incluía un lote con catorce botellas de vino, una por cada bodega. Un premio muy adecuado.