Lardero

Un carril bici de categoría especial

Las rampas más duras del Alto de Moncalvillo alcanzan el 15% de desnivel y las de la Cruz de la Demanda, el 17%, las dos ascensiones de montaña más exigentes del ciclismo de carretera en La Rioja. El puente sobre la AP-68 del carril ciclopeatonal entre Logroño y Lardero abierto el pasado jueves cuenta hasta con señales de tráfico que informan de que la pendiente a la que se enfrenta el ciclista es del 13% por el lado de Villa Patro y del 10% por el camino de Lardero. Curiosamente, las señales solo son visibles en sentido descendente, no en el ascenso.

Comprobada la infraestructura con medidores deportivos, la pendiente alcanza en un punto el 17% de desnivel, como la peor rampa del puerto de Peña Hincada. El puente mide unos 205 metros y supone una abrupta subida de unos 19 metros de altitud. Y el problema no son solo los ascensos, también las bajadas, en las que, sin frenar ni pedalear, se pueden alcanzar fácilmente los 45 kilómetros por hora.

La 'Guía de recomendaciones para el diseño de infraestructuras ciclistas' realizada en 2023 por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible aconseja que «las rampas no superen el 5% de pendiente, pudiendo adoptarse pendientes hasta el 8% en casos excepcionales», apuntando a que son más asumibles en los pasos inferiores «dado que los ciclistas afrontan primero una pendiente hacia abajo que les sirve de impulso para afrontar el tramo ascendente». La guía también recomienda «evitar pendientes elevadas y ofrecer los recorridos con el menor desnivel» de forma que se garantice que «el trazado del paso ciclista no implique un aumento del desnivel a salvar que penalice al ciclista».

Para el colectivo Logroño en Bici-Ecologistas en Acción, el fuerte desnivel no es el único problema de esta infraestructura, también señala las rampas de garaje y su diseño a cota de acera sin guardar las distancias de seguridad ni elementos verticales laterales y acabando en mediana, «por debajo de las recomendaciones del Ministerio». «Aun con todo, será un avance porque es el menos malo de los tres carriles ciclopeatonales promovidos por el Gobierno de La Rioja en el área metropolitana de Logroño», señala Logroño en Bici-Ecologistas en Acción, teniendo en cuenta también los de Villamediana y del polígono Cantabria.

Y aún hay más. Desde el pasado verano la obra adjudicada por el Ejecutivo regional a Becsa por 1.028.982,40 euros para construir 1.882,63 metros de carril ciclopeatonal entre Logroño y Lardero permanece parada, habiéndose completado unos 800 metros, más los 476 de toda la infraestructura del puente. Queda el tramo logroñés de Ramblasque y avenida de la Sierra. Según informa el Gobierno riojano, la obra «se encuentra a la espera de contar con la disponibilidad de los terrenos del sector Ramblasque» para poder continuar con el proyecto, habiéndose abonado a la empresa la cuantía correspondiente a los trabajos ejecutados hasta el momento.

• Temas
• Lardero