La tristeza de la cigüeña sin nido

Ha pasado una semana desde la retirada del nido de cigüeñas del torreón del juzgado de Haro, pero, a los pocos días, los animales desahuciados volvieron a buscar su lugar. Al principio fueron dos las aves que regresaron. Pero durante los últimos días solo se ve una, que permanece casi todo el día allí, junto a un espacio vacío que antes ocupaba el gran nido –algunos vecinos aseguran que hace casi una década–. Ahora solo queda el andamio y, eso sí, la bolsa con los restos del nido. O una de ellas, porque hay otra que continúa abajo, a los pies de la escalinata, desde el primer día. Donde cayó después de que los operarios la arrojasen desde arriba.

La retirada del nido era el primer paso para llevar a cabo la reforma del torreón, una obra cuya ejecución lleva dilatándose años y cuya licencia lleva aprobada desde octubre del año pasado.

Y este ha sido el desencadenante del enfado de los vecinos, que pudiendo haberse hecho antes, se haya aprovechado el momento de reproducción de estas aves protegidas para llevar a cabo el desalojo, como denunció también Ecologistas en Acción.

IU La Rioja trasladó una pregunta al Pleno del Parlamento riojano: «Henar Moreno, como representante del grupo parlamentario de Izquierda Unida, presentó –para respuesta por escrito– una pregunta sobre el incumplimiento de la Ley 2/2023 sobre la protección de la biodiversidad y el patrimonio natural de La Rioja al retirar el nido de cigüeñas ubicado en el torreón del edificio Cid Paternina. En la citada Ley se prohibe dar muerte, dañar o inquietar intencionadamente a las especies silvestres. Se incluye la prohibición de actuar sobre sus nidos, sus crías o sus huevos».

Pero ella sigue allí, ajena al revuelo causado y sin comprender por qué un trabajo de tantos años ha desaparecido y si se habilitará, como en otras ocasiones, un soporte artificial en las cercanías que le permita continuar con su ciclo vital.

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