Recta final de las obras en Haro

Por ello, otro de los aspectos contemplados en el inicio de la intervención fue la reparación del aglomerado asfáltico mediante el fresado de la capa superficial, que acoge el tránsito de vehículos y su rodadura y la reposición de esta, ajustando a la nueva rasante los pozos y registros existentes.

Otra actuación que se ha llevado a cabo es el desmontaje del tendido aéreo de telefonía y de los postes de madera existentes. Posteriormente, se ha construido una nueva canalización subterránea, para dar continuidad a la que había en la acera.

Además, se desmontaron y trasladaron los puntos de luz y se repusieron en nuevas ubicaciones, como apuntó al Consistorio.

Por este motivo, en este tramo de Fernández Ollero se ha construido una nueva canalización de alumbrado público en ambas aceras. Actualmente queda por instalar toda la iluminación de la acera derecha, algo que, previsiblemente, sucederá a lo largo de la próxima semana.

Otro de los trabajos que quedan para dar por terminada la obra es el asfaltado general de la calle.

Por último, se instalará una nueva señalización horizontal y vertical.

La actuación en la calle era una demanda ciudadana cada día más necesaria. La precaria situación del firme obligaba a los conductores a eludir uno de los accesos principales al centro de la ciudad desde la zona de El Mazo.

Además, se trata de una calle en la que recientemente se ha terminado un nuevo edificio residencial y se está desarrollando otra obra, que próximamente proporcionarán más afluencia y movimiento a la calle.

La reforma de la vía jarrera, que contaba con un plazo de ejecución de tres meses, comenzó a finales del mes de enero y ha contado con una inversión superior a los 360.000 euros.

El proyecto se ha ejecutado a través de una modificación de crédito proveniente de la venta de madera de una chopera de propiedad municipal, entre otras.