La alcaldesa, Laura Rivado, destacó entre las inversiones el nuevo depósito de agua para la ciudad y la renovación del alumbrado. «Dentro de la obligación que tenemos de priorizar, lo importante para Haro ahora es el abastecimiento de agua y la correcta iluminación del casco urbano», justificó. En esta sentido figuran las partidas de 300.000 euros para un nuevo depósito de agua potable, y otra de 400.000 euros para la renovación del alumbrado público con el cambio a lámparas Led, aunque en este caso, el horizonte final está puesto en el 2023.
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Según explicó la primer edil jarrera, «Haro por población tiene que tener dos depósitos de agua potable dispuestos para su uso. El año pasado hubo un derrumbe en uno de ellos y se hizo un proyecto para reformarlo y rehabilitarlo, pero mientras se estaban haciendo las obras hubo un nuevo derrumbe, con lo cual hay que volver a comenzar». En la actualidad se sigue funcionando con un solo depósito lo que, según Rivado, «no es problema ni lo ha sido incluso en verano, pero se trata de una obra que no puede esperar».
En cuanto a la renovación del alumbrado, la alcaldesa señaló que «hay que hacer un proyecto para toda la ciudad y empezar a acometerlo por zonas», para lo que se cuenta con una subvención europea que abarca a la mitad del coste.
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