La guardería jarrera Las Luces se ve obligada a enviar a los niños a casa debido a las goteras

En el mes de octubre el Gobierno riojano solicitó la licencia de obras al Ayuntamiento jarrero, aunque desde el Ejecutivo regional insistieron entonces en que las obras en la escuela infantil Las Luces de Haro se habían desarrollado a lo largo de este verano, pero, «debido a su envergadura», no habían finalizado y «se continuaba trabajando para solucionar todos los problemas de la cubierta».

Lo cierto es que a las dos clases que habitualmente se cierran por caída de agua, este lunes se sumaba también el comedor, que estaba salpicado de cubos y fregonas. «Cuando hemos llegado esta mañana los cubos se habían desbordado y estaba todo el suelo y las sillas llenos de agua. Hemos estado fregando», explicaba una de las educadoras del centro.

En el espacio central se encontraban otra decena de ellas, vigilando a los niños a los que sus padres no habían podido ir a buscar por encontrarse ya trabajando y sin otra opción de conciliación. A media mañana, la Asociación de Madres y Padres de la escuela infantil emitían un comunicado: «Queremos manifestar nuestra profunda preocupación por las recurrentes incidencias que afectan a las instalaciones del centro comprometiendo, no solo la seguridad de los menores, sino también el entorno laboral de los profesionales que trabajan en él», señalaron de forma conjunta.

«A pesar de las repetidas quejas por parte de las familias y el equipo docente, las medidas adoptadas por las autoridades han sido insuficientes. Aunque se han anunciado proyectos de rehabilitación, a día de hoy las reparaciones definitivas no se han llevado a cabo», denunciaron en el escrito. «Esto evidencia una falta de prioridad hacia la resolución de un problema que afecta a una infraestructura clave».

Por ello, exigieron «a las autoridades, tanto del Ayuntamiento de Haro como del Gobierno de La Rioja que cumplan con sus compromisos de intervención inmediata», y solicitaron «un cronograma claro de obras que garantice una solución definitiva».

Alertados por las trabajadoras del centro, acudieron representantes de la Dirección General de Gestión Educativa, del área de Primer Ciclo de Infantil y una aparejadora, quienes les aseguraron que el proceso «está en marcha» y anunciaron que las obras comenzarían en marzo. También, que «intentarán buscar una solución antes», apuntaron desde el centro.