C. V.
Sábado, 3 de junio 2017, 14:16
El edificio que hace esquina al final de la calle de la Vega pertenecía a la familia Briones, que en su día decidió cederlo al Ayuntamiento de Haro. Hacia el 2006 se llegó a un acuerdo y el inmueble pasó a manos del Consistorio jarrero ... mientras éste mantuviera el compromiso de restaurarlo. El anterior equipo de gobierno, liderado entonces por Patricio Capellán, encargó el proyecto a Tabuenca y Leache y varios meses después consiguieron el compromiso del Ministerio de Fomento para hacerse cargo de la totalidad de las obras.
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El actual gobierno en coalición completó los trámites necesarios para que se pudieran iniciar unas obras que se han ido retrasando debido a la repetición de las elecciones y la aprobación del Presupuesto. Finalmente, casi cinco años después de que se elaborara el proyecto, comenzarán unas obras que van a rejuvenecer un edificio por dentro en todos los sentidos. Porque serán los jóvenes jarreros los que lo llenen de vida gracias a su transformación en centro juvenil.
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