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La gratitud se hace tangible en la 'curva de Tolín'

La gratitud se hace tangible en la 'curva de Tolín'

El Ayuntamiento y la Sociedad Local de Caza y Pesca homenajearon al agente forestal Antonio Solanas, fallecido en 2020 por COVID-19

Javier Albo

Santo Domingo

Miércoles, 31 de marzo 2021, 20:46

La 'curva de Tolín' no es un nombre reconocido oficialmente ni consta en ninguna parte, salvo en el recuerdo de muchos. 'Tolín' era como llamaban a Antonio Solanas, un agente forestal de Ezcaray y, a la vista está, mucho más que eso, que falleció el 24 de marzo del pasado año 2020, víctima del COVID-19. En aquella curva estratégica situada más arriba del Llano de la Casa, una suerte de mirador desde el que acostumbraba a vigilar y controlar el monte, recibió el sentido homenaje organizado por el Ayuntamiento de la villa y por la Sociedad Local de Caza y Pesca de Ezcaray.

Allí, en la curva, se hizo tangible el emotivo recuerdo, cristalizado en un panel paisajístico en cuya elaboración han participado el Ayuntamiento de Ezcaray, el naturalista Juan José Arguisjuela y también Ricardo Aransay. En él se ha incluido la siguiente dedicatoria: «Desde este privilegiado balcón panorámico rendimos homenaje a nuestro vecino y natural de Ezcaray, Antonio Solanas Cámara (1952-2020), 'Tolín' para familiares y amigos. Desde este mismo punto de vigilancia se encargaba de velar por la conservación de este magnífico entorno natural en su función como agente forestal al servicio de la Comunidad Autónoma de La Rioja».

El acto reunió en ese punto al Ayuntamiento de Ezcaray, representado por su alcalde, Gonzalo Abajo, y concejales, entre ellos el de Medio Ambiente, Jorge Lladó, que hizo de maestro de ceremonias. También estuvo presente, en representación del Gobierno de La Rioja, Ignacio Tejedor de la Asunción, jefe del área de Lucha contra la Erosión y Gestión Territorial; miembros de la Guardería Forestal, retén de incendios, el guarda mayor, Mario García, y su predecesor en el puesto, Felipe Somovilla, así como familiares del homenajeado, entre ellos sus hermanas, Valvanera y Consuelo Solanas, la primera de las cuales leyó a los asistentes una emotiva carta.

«Se le veía no como un guarda forestal, que también, sino como un compañero más de caza, por su carácter, por cómo era como persona y a base de tantas horas de compartir batidas», destaca Alberto Loma, representante de la Sociedad de Caza y Pesca de Ezcaray, de la que partió la iniciativa. El alcalde, Gonzalo Abajo, puso este miércoles en valor el trabajo del agente forestal homenajeado, pero también el de todos cuantos trabajan en el mantenimiento de los montes.

Amabilidad, cordialidad y cercanía fueron algunos de los adjetivos escuchados este miércoles, en nada incompatibles con su ejemplar cumplimiento de su deber.

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