La Fiesta de Almazuelas Colgadas celebra su undécima edición a la espera de respuestas

La solicitud, presentada a principios de mayo, cuenta con tres meses de plazo para obtener una respuesta y la aspiración del Consistorio era obtener esta calificación para la presente edición, pero el retraso lo impedirá, si es que la respuesta es positiva. No es la única resolución que espera la organización. Jesús Toledo, gerente de 'Altura' y responsable de la oficina de turismo de Cameros con sede en Pradillo, informó de que ha solicitado a la Real Academia Española que sea aceptado en el diccionario el riojanismo de origen árabe 'almazuela'.

«Es el pueblo de Pradillo el que quiere que la fiesta sea declarada de Interés Turístico Regional y para eso se ha realizado un esfuerzo para atraer a más artesanas y almazuelas, además de contar con la proyección nacional que dará el concierto de Pablo Sainz Villegas», expuso Jesús Toledo, quien destacó la singularidad y originalidad del evento, que posteriormente ha sido imitado por otros municipios.

Para la nueva edición se reunirán una treintena de artesanas tanto de ocho pueblos de La Rioja como de comunidades como Islas Baleares, País Vasco, Madrid, Cataluña... «No solo es arte, es artesanía textil de los Cameros», subrayó Toledo, recordando la imprescindible labor de Lola Barasoain. «Cada año damos un paso más para que Pradillo sea un referente nacional», apuntó el gerente de 'Altura'.

El programa comenzará el sábado 19 de agosto con la exposición al aire libre de las almazuelas en El Prado y las casas de Pradillo, además de mercado, talleres y paseos guiados a las 12.00 y 17.00 horas. El domingo actuará Pablo Sainz Villegas a las 12.00 horas en la iglesia de San Martín, cuyas invitaciones se facilitarán el sábado a partir de las 11.00 horas en la oficina de turismo.

Como broche final, a las 14.00 horas, en el bar Los Cucharones, se sorteará la almazuela colectiva elaborada el año pasado en los talleres bajo la directriz de la artesana riojana Regina Martínez ('Margo'). «Llevamos meses trabajando para preparar un buen menú para que la gente acabe chupándose los dedos», advirtió Margo.