Arenzana de Abajo

El 'divino remedio' del vino vuelve a Reikiavik

El largometraje es una comedia ambientada en torno al mundo del vino. Cuenta la historia de cuatro sacerdotes que viajan de Reikiavik a España para buscar un caldo de calidad que logre aumentar la asistencia a las misas en su país. Aquí les hace de guía una compatriota con problemas de alcoholismo, con la que vivirán graciosas situaciones. «Escogimos La Rioja debido a que posee una belleza natural superior a otras regiones vitivinícolas europeas», detalla Örn Marino Arnarson, director de la cinta.

Producir 'Divino Remedio' ha costado en torno a un millón de euros, y el trabajo aún no está acabado, pues aún hace falta filmar algunas escenas extra en Islandia. No obstante, el tramo riojano ya ha concluido, con un gran sabor de boca. «Ha llovido tanto que nos hemos sentido como en casa», dice entre risas Ester, la maquilladora del grupo.

Entre actores y miembros del equipo han venido un total de 15 personas del país norteuropeo, que también han filmado en otros municipios como Logroño, Haro o Laguardia. «Las jornadas de trabajo resultan agotadoras, cerca de doce horas al día yendo de un lado para otro, a ver si para la próxima podemos hacer algo de turismo porque solo hemos visitado las zonas en las que hemos grabado», explica Ingibjörg, la encargada de vestuarios.

A pesar de la dura dedicación que requiere esta labor, ambas se muestran satisfechas con el resultado y el haber gozado de un ambiente «familiar». Y es que allí por donde han pasado, los vecinos les han puesto la alfombra roja. Incluso algunos de ellos han dispuesto de pequeños papeles en la trama. Divertidos casos como el del alcalde de Tricio vestido de monje así lo prueban.

O el de Beatriz, una vecina de Arenzana que también ha participado en el rodaje. «Estaban filmando una escena en mi bodega cuando me han ofrecido hacer de monja, ha sido chistoso», asegura ella. Las gestiones han resultado fáciles gracias a la ayuda de una productora vasca, propiedad de un amigo del director, que ha fomentado la cercanía entre foráneos y lugareños.

«En el futuro, intentaremos realizar proyecciones en los pueblos por donde hemos pasado, les debemos eso», explica Arnarson, el cineasta responsable del proyecto. Por otra parte, confirma su intención de llevar 'Divino Remedio' al circuito de festivales de cine con el fin de ganar fama y reconocimiento. Quién sabe si dentro de unos meses se verá en Nueva York o Ámsterdam a cuatro curas islandeses buscar el vino perfecto por los bellos parajes de la comarca de Nájera.