Los cenicerenses degustan el arrope

Esta es ya una tradición que los Amigos de Cenicero realizan desde hace 25 años. En época de vendimias, los miembros de esta asociación comienzan a preparar el arrope, que se trata de una elaboración a base de mosto sin fermentar, que se va cociendo, removiendo y colando para limpiar las impurezas. De ahí, se consigue una especie de «jarabe que se come untado en pan», explica David Gangutia, presidente de la Asociación de Amigos de Cenicero.

Gangutia cuenta que esta es una tradición en la localidad que «antiguamente, sobre todo después de la guerra, se hacía para los críos, pues tiene muchas vitaminas». Ahora, la elaboración del arrope es algo que la asociación quiere mantener, y por eso «se invita a los niños de la escuela para que vean cómo se hace», y se ofrece esta degustación durante el Día de los Urbanos, en el que decenas de vecinos disfrutan de este particular alimento.