Un campus rural de teatro en un palacio

Desde este lunes, once chavales procedentes de distintas partes de España disfrutan de un campus juvenil de teatro en el pequeño pueblo de Canillas de Río Tuerto. La propuesta, impartida por On&Off y Realidad Traviesa, no se desarrolla en un lugar cualquiera, sino en la imponente Casa-Palacio de los Manso de Zúñiga.

Allí, profesores y alumnos comerán, ensayarán y dormirán juntos hasta que su estancia finalice, con una representación para el municipio el miércoles 21 de agosto. Incluida dentro de la programación de Escenario Vivo y titulada 'La voz de la tierra', la función final servirá como alegato a favor del retorno a nuestros orígenes rurales.

«Los chavales van a entrevistar a vecinos del pueblo para incluir sus historias en la obra y que esa tradición oral, que nos devuelve a nuestra esencia, no se pierda», explica Sergio Gayol, uno de los monitores. «Además, queremos convencer a un señor mayor de aquí, al que llaman 'El francés' para que nos cante una jota», añade sonrientemente.

El buen rollo se respira entre los pupilos del campamento. El grupo se divide entre aquellos más veteranos que han hecho teatro antes, y otros que están empezando en esto. Es el caso de la logroñesa Eman, que a sus 17 años le apetecía probar «para descubrir el mundillo y conocer a gente nueva». De momento, lo que más disfruta ella es de «la mente abierta que tienen todos, lo rápido que conectamos».

Aparte de las lecciones corporales, de texto o dinámicas de grupo que están recibiendo los once, al campus acuden nombres de prestigio para darles clases magistrales. En la primera jornada, fue el escritor cubano Alexis Díaz-Pimienta, y en los próximos días llegará el turno del cantautor Marwan o de la prestigiosa compañía 'El Patio Teatro'.

«Me enteré de este campus por un cartel y la verdad que está genial, yo que llevo un par de años haciendo teatro en Logroño, disfruto aprendiendo nuevas técnicas», comenta Julia, una de las participantes. Cuando cuenta, entre risas, que por la mañana les han mandado hacer abdominales para calentar, su amigo Adrián, que participa junto a ella, se ríe. «Julia me convenció para apuntarme y no pude rechazarlo, me va a gustar mucho actuar juntos el día 21 delante de todos los vecinos», replica él.

La presencia de este campus teatral, que ya va por su segunda edición, aporta un valor añadido a la semana cultural de Canillas de Río Tuerto. Hasta el viernes, en el pueblo habrá conferencias, exposiciones fotográficas o una cena de confraternidad.

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