Otro camión atascado, esta vez en Villarejo

Al parecer, el conductor del camión, de nacionalidad rumana, seguía las indicaciones del GPS, en busca de una gasolinera, dentro de su trayecto hacia su destino final en Alemania. Antes de encontrar la estación de servicio ha terminado encajonado en las estrechas calles del pueblo.

Ha sido el alcalde de Villarejo, Ricardo Valdovinos, quien avisó a la Guardia Civil. Ha sido gracias a la ayuda de los agentes que el conductor ha podido hacer las correspondientes maniobras y salir de la 'ratonera' en la que se había metido.

El Ayuntamiento colocó hace unos cuantos meses una señal de carretera sin salida en el cruce de la localidad, pese a lo cual los camiones siguen llegando a ella para meterse en problemas por una excesiva confianza en el GPS.

No es la primera vez que la sierra riojana se convierte en destino inesperado de vehículos pesados que terminan atascados en las carreteras comarcales o incluso en pistas forestales.

Un tráiler perdido, procedente de Lituania, se empotró el miércoles 26 contra un balcón en la calle mayor de San Millán de la Cogolla. El vehículo, cargado de yogures, arrancó el cable del alumbrado de la calle, que empezó a arder. La rápida reacción del camionero y de un joven vecino de San Millán impidió que ardiesen el camión y las casas colindantes.

El último caso ocurrió en 2023, cuando un camión-tráiler lituano se quedó atascado por la mañana en la carretera que conduce a la aldea de Turza, en una de cuyas curvas quedó fuera de la calzada la parte trasera del vehículo.

No era el primer camión que se quedaba atascado en esta zona. Todo empezó en el año 2015, cuando un enorme tráiler frigorífico que debía transportar a Riga (Letonia) desde Murcia 22 toneladas de cítricos terminó atrapado en un camino forestal en el paraje de Monte Hondo, varios kilómetros más allá del final de la carretera de Bonicaparra.

Posteriormente, un camión se atrancó en agosto de 2020 en la pista forestal que conduce a la aldea de Turza. Después vinieron otros, alguno de ellos cerca de este mismo punto.

En Monte Hondo en diciembre de 2015; otro en el puente Canillas, en Posadas en 2016; otro que circulaba por la zona de Cobetia -cerca del San Lorenzo- en mitad del temporal 'Fabien', que terminó volcándolo. Y algunos más. Al final se supo que, en algunos de los casos, el GPS les mandaba hacia una inexistente gasolinera situada en la citada aldea.

La zona terminó convirtiéndose en un misterioso 'triángulo de las Bermudas' para estos vehículos, ya que se dieron bastantes casos en poco tiempo. En noviembre del 2018 otro camión intentó subir al San Lorenzo, pero pudo dar la vuelta.

También, en enero de 2019 un camión perdido permaneció más de treinta horas atascado en el monte de Lugar del Río, monte arriba camino del San Lorenzo en una pista, ya pasada la zona asfaltada y dentro del camino de tierra. Vista la situación, el Ayuntamiento de Ezcaray colocó unas visibles señales de 'Carretera sin salida' en varios accesos -en español, inglés y ruso, narraba Javier Albo en sus crónicas.

Y no sólo en esta zona, también en mayo del 2016 se quedó un trailer atrapado en Bañares.

Por su parte, en abril de 2017, un camión portugués que iba a Cantabria acabó atascado en Nestares. El vehículo quedó atrapado durante una hora y media en la entrada de la localidad riojana, hasta que los vecinos de la localidad le ayudaron a salir.

Otro caso ocurrió en mayo de 2019, cuando un camión de gran tonelaje de la compañía Waberer´s y procedente de Hungría, se quedó atascado en una de las estrechas calles de San Millán de la Cogolla, la misma que en esta ocasión. El conductor, siguiendo las indicaciones del GPS, había llegado hasta el desvío que conduce al monte, donde con anterioridad otros vehículos pesados habían quedado atrapados, la mayoría de la misma compañía. Al observar el cartel que indicaba que se acababa la carretera, trató de volver y se metió por la calle central de la localidad, donde se quedó atascado.