«Algo imposible que ocurra, de repente te pasa ti»

«Más que felicidad, yo diría que se siente mucha alegría, mucha ilusión...», dice este panadero, cuya imagen celebrando el primer premio se coló a través de las televisiones por los hogares de toda España. El Gordo hizo popular también a la hermandad calagurritana: «Cuando salíamos fuera de la ciudad ya no nos conocían como la cofradía de Calahorra, sino como la del Gordo».

«Lo vives sobre todo como algo increíble. Algo que piensas que es imposible que te ocurra de repente te pasa a ti», comenta de aquel 22 de diciembre que le ha traído muchas anécdotas. «Los que no te conocen, hay veces que ni se lo creen. El año pasado estaba hospitalizado por estas fechas, y en el hospital alguien dijo que a él nunca le tocaba nada. Yo conté entonces que a mí me había tocado el Gordo y no se lo creían», cuenta.

Esta vez, sin embargo, los calagurritanos se tienen que conformar con terminaciones y pedreas. Pero no por ello se pierde la esperanza de que la suerte llegue por segunda vez. «La ilusión no se pierde y más cuando ves que te ha tocado», sostiene Félix Herce. Y es que «para Calahorra y para la cofradía fue algo extraordinario». «A la Vera Cruz le vino muy bien para pagar las obras de San Francisco, que nos habían endeudado», explica.